O Salnés inicia la colocación de 2.000 trampas para frenar la expansión de la velutina

La avispa asiática vuelve a resurgir después de varios meses hibernando para construir nidos embrionarios | Suelen construirlos en lugares ocultos, secos y abrigados del viento

Eliminación de un nido de velutina por parte del servicio mancomunado.

Eliminación de un nido de velutina por parte del servicio mancomunado. / Noé Parga

A. G.

Desde hace más de una década, la avispa velutina o asiática se ha convertido en un molesto invitado en la comarca de O Salnés, tan molesto que ha llevado a la Mancomunidade a crear un servicio específico para su eliminación que actúa en ocho de los nueve municipios que la integran. El servicio de lucha contra la velutina, con la llegada del mes de marzo y el inicio de la actividad de la avispa asiática, ha comenzado a instalar las trampas, un método que permite reducir en un considerable número las reinas, aquellas que elaboran los nidos que acaban convirtiéndose en un problema tanto para los insectos autóctonos como para las personas. Los dos operarios con los que cuenta el servicio han comenzado a instalar cerca de 2.000 trampas por toda la comarca, unas trampas que, el pasado ejercicio, sirvieron para sacar de la circulación 12.500 velutinas. De hecho, una de esas trampas, situada en un camelio en András, consiguió eliminar ella sola más de 60 reinas.

Chema Pedrouzos, integrante del servicio de lucha contra la velutina, reconoce que las trampas “son fundamentales en esta batalla que libramos contra la avispa asiática, ya que permiten reducir la cantidad de reinas y, por ende, el número de nidos que se van a tener que eliminar después”.

Tras hibernar durante meses en lugares donde puedan estar tranquilas (agujeros en bloques, huevos en la corteza de árboles, ... sitios muy abrigados donde no les llueva o sientan frío) la actividad de las velutinas se reactiva a medida que se acerca la primavera. El motivo, es el ligero incremento de las temperaturas y unas mejores condiciones meteorológicas. “Es ahora cuando inician su ciclo y comienzan a elaborar los nidos embrionarios, un nido muy frágil, donde solo trabaja ella y que suelen tener la capacidad de una pelota de tenis; será de ese nido del que salen las primeras obreras, entre veinte y treinta”. Los lugares elegidos para tal efecto suelen ser el tejado de fibrocemento de pequeños galpones o lugares próximos a una caldera “donde pueden estar calientes y sin que nadie las moleste, por eso recomiendo ir mirando esos lugares para comprobar si se está construyendo algún nido embrionario”.

Este período se mantiene hasta finales del mes de mayo, cuando comienzan con los nidos primarios, mientras que los enormes, de cerca de sesenta litros de capacidad, acaban siendo construidos en torno al mes de septiembre. Este ciclo puede variar mínimamente dependiendo de las condiciones meteorológicas que imperen en cada momento, acelerando o ralentizando la presencia de las velutinas.

Durante el año 2023 se retiraron un total de 960 nidos en los ocho municipios de la comarca. El más grande se retiró de un galpón de Sanxenxo y rondaría los 60 litros de capacidad, aunque la media se situaría entre los 30 y los 40. La respuesta media del servicio para acudir a una retirada fue de menos de 48 horas, algo que se espera mantener este año. El momento más duro de la actividad se concentra en los meses de julio y agosto.

Cómo crear una trampa contra la avispa asiática

Las 1.960 trampas están realizando un importante trabajo, pero desde el servicio mancomunado animan a los vecinos a participar en el trampeo. Para ello Pedrouzos recomienda coger una botella de agua de litro y medio, practicar tres agujeros en el tercio superior de doce milímetros de ancho en los que se pueda insertar una manguera de tres centímetros de longitud. Esta debe quedar hacia dentro para facilitar la entrada a la velutina e impedirle la salida. El atrayente a utilizar sería muy sencillo: echar ocho cucharadas de azúcar en medio litro de agua, calentarlo para que se disuelva el azúcar y después echar un taco doméstico de levadura de pan. Una vez elaborado el atrayente ya solo queda escoger el lugar ideal para capturar reinas y ese punto es un camelio donde dé el sol la mayor parte del día. El trampeo no es el único método efectivo que se usa para luchar contra la velutina. De hecho, cuando ya han proliferado los nidos, el servicio utiliza otras alternativas entre las que se encuentran los perdigones. El pasado año, la carabina que posee el servicio utilizó 8.200 perdigones llenos de insecticida, es decir, una media de veinte perdigones por cada nido eliminado. La utilización de la carabina ha permitido reducir el gasto que se hacía en un principio en insecticidas, ya que antes se utilizaba un bote entero, que superaba ampliamente los doce euros, y ahora no se alcanzan los dos euros. La carabina permite eliminar el nido sin riesgo para los operarios del servicio, al disparar a una distancia relativamente lejana.

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