Ruptura entre la concesionaria del albergue y Meis

El Concello espera que la nueva empresa lo gestione a partir de marzo

Peregrinos a las puertas del albergue de Armenteira.

Peregrinos a las puertas del albergue de Armenteira. / Noé Parga

A. G.

Dos años después de haberse hecho cargo del albergue de Armenteira, Víctor Abal y el Concello de Meis separan sus caminos y lo hacen de forma no precisamente amistosa, con el concesionario atacando a los responsables de la Administración municipal por todas las trabas a las que ha tenido que hacer frente en estos años. Mientras, desde el Concello le acusan de haber incumplido una serie de normas que motivaron varias denuncias y la apertura de un expediente que ha finalizado con el concello rescindiendo el contrato y renunciando a los dos años prorrogables que tenían ambas partes.

Abal aseguraba ayer que no entiende los motivos por los que no se le renueva el contrato. De hecho, comenzó este año a perfilar lo que será la próxima campaña, cerrando reservas y contactando con turoperadoras. Sin embargo, se ha encontrado con que “ha salido a concurso su gestión, por lo que he tenido que dar marcha atrás y anular todas esas reservas cuando ya tenía muchas cerradas, incluso de grupos de otros países”. Se queja de que no se le comunicase en las últimas reuniones con integrantes del grupo de gobierno, en las que “llegamos a hablar de como veíamos los próximos meses” y alerta de que la situación está causando una honda preocupación entre albergues de Poio y Vilanova al no existir otras instalaciones adecuadas entre esos dos puntos. “Da la sensación de que al Concello le preocupa poco la Variante Espiritual”, tercia Abal. El hasta ahora concesionario del albergue también carga contra el Concello de Meis por los problemas de humedades que ha tenido en la edificación, unos problemas que “han provocado que se caiga el falso techo, se lo comentó a los responsables municipales, porque entendía que debía solucionarse cuanto antes para poder abrirlo, pero no me comentan nada de que se va a sacar a concurso”. Abal asegura que ha quedado muy disgustado con el Concello de Meis y que no se presentará al concurso, lo que supone que se puedan perder los tres puestos de trabajo.

Por su parte, Marta Giráldez, alcaldesa del Concello de Meis, respondía ayer que la comunicación de que se le iba rescindir el contrato a los dos años le fue notificada en el mes de septiembre y que, por ende, se renovaba el proceso de concurso. La primera edil explica que “todo esto parte de que la concesionaria tuvo problemas, con denuncias desde hace año y medio, de que no se prestaba solo alojamiento, como se circunscribía en las bases, sino que se daban comidas o se hacía servicio de taxi”. En lo que respecta a las humedades, Giráldez recuerda que se acometieron obras en la fachada y se están llevando a cabo las acciones necesarias para solucionar el hundimiento del falso techo; en el Concello siempre hemos estado a su disposición para solucionar cualquier problema pero ante las denuncias por incumplimiento solo hemos aplicado las bases”.

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