O Salnés tienta la suerte con los réditos que dejó la Navidad

La administración de A Illa y el bar Campos, donde toco el Gordo, incrementan sus ventas para el sorteo de mañana

La administración de A Illa repartió el pasado día 22 el Gordo y tres quintos.

La administración de A Illa repartió el pasado día 22 el Gordo y tres quintos. / Noé Parga

R. A.

Los excesos navideños comienzan y rematan pendientes de un sorteo de la Lotería Nacional. Mañana, el Salón de Loterías y Apuestas del Estado acoge el Sorteo de la Lotería del Niño a partir de las 12.00, una nueva oportunidad para tentar a la suerte. Visto que esta se ha asentado en la comarca de O Salnés, donde el pasado 22 de diciembre se vendió el Gordo, el segundo y tres quintos premios, las ventas se han disparado en comparación con otros años, especialmente en aquellas administraciones y puestos de venta que repartieron esos premios al inicio de las navidades.

Uno de los lugares al que parece no abandonar la suerte desde que repartiera 15 millones de euros de un cuarto premio en 2021 es la administración de lotería de A Illa de Arousa. Desde entonces ha ido incrementando progresivamente el número de premios repartidos en ese sorteo, aunque el del Niño se le resiste todavía. Manuel Núñez, responsable de la administración isleña espera que esa situación cambie este año y “sigamos aprovechando la racha que llevamos repartiendo algún premio, a ser posible también el Gordo”. El isleño reconoce que los premios que ha repartido este año en la Navidad “están influyendo para que venga mucha gente de municipios limítrofes a comprar Lotería del Niño aquí, de hecho, creo que este año superamos nuestro récord de ventas en este sorteo”. Entiende que la gente “esta ilusionada y eso te anima porque cuanto más vendas, más posibilidades tenemos de que podamos darlo”.

Núñez recuerda que este sorteo cuenta con unas particularidades un tanto diferentes al de Navidad. Para empezar, el tiempo de venta, que es de tan solo un par de semanas, además de reducirse el número de series por número, que pasan de 185 a 55. Las ventas suelen ser mucho más en ventanilla y de décimos sueltos, sobre todo “por parte de personas que deciden gastarse el reintegro o parte de una pedrea del Día de Navidad tentando un poco más a la suerte”. Los números que más tiran no varían mucho con respecto a la Navidad, en donde siempre triunfan terminaciones como el 13, cinco y ocho.

El otro punto de la comarca donde tocó el Gordo el pasado día 22 fue el bar Campos de Vilagarcía, cuya propietaria, Nati Campos, reconoce que ha visto como las ventas por máquina de décimos para este sorteo se disparaban con respecto a otros años. “La gente está cogiendo el número que tenemos de la casa y después siempre coge algo en el automático”, explica. Aunque sigue habiendo gente que se fija en las terminaciones, “da la sensación de que en este sorteo los compradores no están tan preocupados por conseguirlas, eso sí, por la que más nos preguntan es por el 8, número que nos permitió vender dos décimos del Gordo”. Al igual que Núñez, Campos espera volver a repartir premios en este sorteo porque “es una inmensa alegría para todos”.

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