La morosidad del Ayuntamiento de Vilagarcía aumentó en diez días en el segundo trimestre del año. En el pleno ordinario celebrado ayer tarde se tuvo conocimiento de este retraso que los departamentos de Tesorería e Intervención justifican en el hecho de la complejidad del nuevo modelo de tarificación eléctrica, pero también como consecuencia de los períodos de vacaciones y descanso del personal administrativo.
Por este motivo, Vilagarcía pasó de pagar a sus proveedores de 59,18 días, es decir por debajo del período legal, a 69,11 días del segundo trimestre del año, es decir, de abril a junio. Una situación que acarrea la obligación de pagar los intereses correspondientes de demora, fijados por el Banco de España en un 8%, sin olvidar una indemnización de 40 euros y si así fuese determinado el coste de las reclamaciones correspondientes.
En todo caso, el informe de Intervención que se presentó al Pleno expone que las causas concretas de los retrasos son las “facturas derivadas de los contratos de suministro de energía eléctrica con registro contable en el ejercicio de 2021 y tramitadas por expediente de reconocimiento extrajudicial de crédito, que a pesar de haber sido reconocidas en la sesión plenaria de junio pasado, fueron pagadas en el mes de julio y, por lo tanto, con posterioridad al segundo trimestre”.
Se aduce en este sentido que al objeto de agilizar la tramitación de las facturas de consumo eléctrico, este se ve ralentizado por la complejidad y características de este tipo de gasto –al tener que comprobarse los consumos y abonos por números de cups–, se implementó un trámite experimental de firma digital en bloque con el Servicio Municipal de Electricidad e Iluminación que visa las facturas, lo que ocasionó también retrasos por la puesta en marcha de la parametrización informática”.
Asimismo se expone que también influyó en esta situación la “falta de medios humanos en el departamento de Intervención”, una reducción de personal que se produce desde noviembre del pasado año en tanto que “parte de las vacaciones y asuntos propios de 2021 fueron ampliados y disfrutados en el segundo trimestre de 2022”. A la vez se puso de manifiesto que la nueva interventora municipal “tomó posesión del puesto en el mes de marzo”.
La Corporación vilagarciana dio asimismo el visto bueno a la consideración de Santa Rita (22 de mayo) y San Roque (16 de agosto) como festivos locales para el próximo año 2023.
Se suman así a los declarados oficialmente por la Xunta de Galicia para el próximo año, es decir: Reyes (6 de enero) Jueves Santo (6 de abril), Viernes Santo (7 de abril), Día del Trabajo (1 de mayo); Día das Letras Galegas (17 de mayo), Día Nacional de Galicia (25 de julio), Asunción de la Virgen (15 de agosto), Fiesta Nacional (12 de octubre), Todos los Santos (1 de noviembre), Día de la Constitución (6 de diciembre),Inmaculada Concepción (8 de diciembre) y Natividad del Señor (25 de diciembre), todos ellos días inhábiles.
Unanimidad frente a los fuegos
Por unanimidad se aprobó ayer por la tarde la moción presentada al Pleno de Vilagarcía por el grupo municipal del Partido Popular (PP) relativa a la mejora de los trabajos de limpieza y mantenimiento de los espacios públicos para prevenir el riesgo de incendios. La propuesta es una reacción al incendio registrado hace unas semanas en el monte de Xiabre que arrasó casi 500 hectáreas en los municipios de Vilagarcía y Caldas de Reis. Recuerda el PP que el fuego se inició “muy cerca del polígono de O Pousadoiro, en el que se encuentran situadas naves industriales que almacenan productos químicos, maderas y otros materiales inflamables”. Admiten que aunque en este caso no hubo que lamentar daños, la situación obliga a poner el foco en la necesidad de mejorar el mantenimiento y la limpieza de estas zonas para reducir la gravedad de la amenaza. En el PP subrayan que faltó diligencia en materia de prevención pues la maleza en los arcenes era notable antes del incendio, como ocurre en otras parroquias del rural.
