Los Ayuntamientos adscritos al programa Revitaliza de la Diputación de Pontevedra están participando en una iniciativa en el norte de España para formarse sobre nuevos sistemas de recogida de residuos que poder llevar a la práctica.

Entre los municipios allí representados están los de O Grove y Vilagarcía y una de las conclusiones más evidentes es el éxito de la recogida puerta a puerta (PaP) en cuanto a calidad y rapidez a la hora de mejorar las tasas de reciclaje y compostaje.

La primera parada de la comitiva pontevedresa fue el ayuntamiento de Kripán de 12.000 habitantes. Allí el compostaje se ha facilitado y, con ello, se ha pasado de un 20% de participación a un 70%.

Otra de las paradas fue en la Mancomunidad de Sakana, concretamente a la planta de compostaje de Arbizu preparada para tratar cerca de 1.300 toneladas de residuos orgánicos. Un proceso que se convierte en un excepcional abono que se reparte gratuitamente entre los vecinos.

Todas estas ideas, anuncian desde Diputación, que tratarán de implantarse en la provincia. Ayer mismo la expedición del viaje formativo del Revitaliza continuó su viaje por el País Vasco, Navarra y Cataluña con otras cuatro experiencias diferentes sobre tratamiento de residuos.

Los ejemplos de Itzasondo, Zaldivia y de la comarca de Sangüesa fueron los conocidos ayer. En la primera localidad, de 1.500 habitantes, el sistema “Puerta a puerta” le ha permitido alcanzar un 80% en recogida selectiva. Unos registros que van de la mano de la presencia de una planta de agrocompostaje que convierte el compost en abono para producción de flores que ayudan a la inclusión social con puestos de trabajo.