El Ayuntamiento de Ribadumia celebró el pasado 13 de marzo el acto central de su programación del 8M, Día de la Mujer. Y a la entrada del Auditorio, las asistentes recibían como regalo un estuche serigrafiado con piezas de manicura y arreglo personal. El concejal de Somos Ribadumia, Enrique Oubiña, afirmó esta mañana en un comunicado que la elección del obsequio es, “tan alucinante como indignante”, y ha solicitado la dimisión de la concejala de Igualdade, Sofía Núñez, o su cese.
Oubiña plantea que el regalo se produjo en el marco de una actividad pensada para fomentar “el empoderamiento femenino, el camino hacia la rotura de los techos de cristal y la igualdad en todos los ámbitos”, pero en su opinión el estuche que entregaron a las asistentes, “tiene la misma carga simbólica denigrante que regalar una plancha de la ropa, una fregona o un juego de sartenes”.
“Desde Somos Ribadumia no podemos aceptar estos comportamientos sexistas y misóginos, que ahondan en una imagen estereotipada y denigratoria de la mujer, asimilándole unos roles que no se corresponden con los de una sociedad igualitaria”, añade el edil de la oposición.
Enrique Oubiña sostiene que si la concelleira de Igualdad, “no tiene capacidad para asumir las bases y principios de la lucha feminista, o no sabe como enfrentar este tipo de acciones”, puede recabar el apoyo técnico del personal de los servicios sociales, del Centro de Información á Muller o de otras políticas, “comprometidas y con conciencia feminista”.
Finalmente, para el representante de Somos Ribadumia, este “despropósito” no es un hecho aislado, pues entiende que el gobierno de David Castro está mostrando muy poca sensibilidad hacia la igualdad de las mujeres y la lucha contra la violencia de género. Sobre esto, argumenta, argumenta, entre otras cosas, que el Concello renunció a una partida de 115.000 euros de ayudas para planes de igualdad, “y a la mayor parte de otros 13.000 para planes de lucha contra la violencia de género”.
Versión del grupo de gobierno
El gobierno municipal de Ribadumia respondió horas después indicando que el estuche, “puede utilizarlo en su casa cualquier miembro de la familia”, y recuerdan a Oubiña que en 2019, cuando él formaba parte del ejecutivo municipal, el obsequio que se entregó en el acto del 8M fue un fular de color rosa y con un pin plateado que representaba una flor. “En ese momento se ve que a él no le pareció ni sexista ni desacertado”, apunta el equipo de David Castro.
Para el ejecutivo local, “quien tiene que dimitir es Enrique Oubiña porque no entiende absolutamente nada la política municipal ni como llevarla a cabo”. “Piensa que cualquier cosa es válida para hacer política”, añade el gobierno, para añadir que, “este equipo de gobierno no tiene tiempo para las torpezas de Somos Ribadumia y de su representante”.