El gobierno de Vilagarcía considera “interesante” y “una buena iniciativa” la creación de un Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP) en la ciudad, aunque apostilla que le gustaría que la Consellería de Educación “fuese más concreta sobre este proyecto, especialmente en cuanto a módulos, inversiones, plazos, movilidad, etcétera”. También echa en falta un “proceso más dialogado con los padres de alumnos y menos precipitado, si bien fomentar y dignificar la formación profesional es algo que coincide con las políticas del Gobierno del Estado”.
Fallan las formas
Así, el ejecutivo de Alberto Varela comparte el fondo pero no las formas. El Concello fue invitado a la reunión celebrada el lunes en el Bouza Brey (IES que se transformará en CIFP) donde altos cargos de la Consellería explicaron el proyecto a la comunidad educativa, pero solo fue avisado con apenas dos horas de antelación “pese a la trascendencia de la cita”. En ese momento, el gobierno estaba reunido en su junta habitual del lunes, con concejales con compromisos ya adquiridos y el alcalde con una cita prevista en Santiago con el delegado del Gobierno en Galicia, por lo que no pudo asistir nadie de Ravella.
Aunque “las formas no fueron las deseables”, el gobierno vilagarciano considera que “lo trascendental es que se siga mejorando la oferta educativa” en la ciudad y espera que la Xunta tome nota de “la realidad del tejido industrial” del municipio y su zona de influencia.
El Castro Alobre y el instituto de Carril se enteraron por los medios
Las formas no solo han fallado con el Ayuntamiento, sino también con los institutos afectados, ya que ni el Castro Alobre ni el Miguel Ángel González Estévez (perderán los ciclos de Cuidados Auxiliares de Enfermería y Acondicionamiento Físico respectivamente) fueron informados de la reordenación de la FP. Se enteraron por la página web de la Consellería y por la prensa.
El CIFP Bouza Brey estrena cuatro ciclos en Vilagarcía y absorbe siete de otros institutos
Mariola Rodríguez
En el caso del Castro Alobre, el instituto ubicado en el centro de Vilagarcía, la pérdida del único ciclo que impartía le permitirá abrir una quinta línea en 1º de Bachillerato, dando así cabida a todo el alumnado y también ofrecer vacantes a nuevos estudiantes, según explica su directora, Mariola Rodríguez.
El centro recibió ayer por la mañana la confirmación por parte del inspector tanto del funcionamiento del quinto grupo en Bachiller como de la supresión de Cuidados Auxiliares de Enfermería.
Rosa Gómez
Por su parte, en el instituto de Carril no ocultan “la tristeza” que les supone perder un ciclo formativo que lleva veinticinco años en marcha y que por tanto está muy arraigado en el centro (antes era TAFAD y desde hace dos años Acondicionamiento Físico, que solo se imparte en cuatro institutos de toda Galicia). “La idea no nos gusta porque hacíamos actividades entre los alumnos del ciclo y del resto de enseñanzas, y eso vamos a perderlo. A largo plazo está bien que se vayan a un centro integrado pero la verdad es que aquí la convivencia era muy buena y tenemos cierta tristeza de que se marchen. Además disponen de unas instalaciones excelentes, con un pabellón exclusivo para ellos”, detalla la directora, Rosa Gómez.
En su opinión, la única buena noticia para el Miguel Ángel González Estévez es que podrá ganar un aula para los alumnos de Bachillerato (especialmente pensando en los catoirenses que tradicionalmente estudian la etapa no obligatoria en Carril al no disponer de oferta en su municipio), si bien apostilla que “para aumentar alumnado también necesitamos más profesores”.
Ignacio Castro
No obstante el instituto más afectado es el Cotarelo Valledor, cuya rama de Comercio y Márketing se trasladará al Bouza Brey, que absorbe un total de siete ciclos y estrena cuatro nuevos. Además, el IES situado en Sobradelo recibirá a los 280 estudiantes de ESO y Bachillerato del Bouza. “Prácticamente se va la misma cantidad de alumnos que la que recibimos y la oferta de Informática la tendremos completa con tres ciclos superiores nuevos: uno de Desarollo de Aplicaciones Multiplataforma, otro de Aplicaciones Web y este último también en horario de tarde para adultos”. Con todo, el director, Ignacio Castro, no oculta que “todos los cambios provocan una cierta resistencia y el alumnado está acostumbrado al instituto”.
Los nuevos alumnos que no quieran ir al Cotarelo pueden pedir plaza en otro IES
Según explica el director del Cotarelo Valledor, Ignacio Castro, el sistema es garantista, de forma que todos los alumnos de ESO y Bachillerato del Bouza Brey y del instituto vilaxoanés tendrán plaza en este último.
Con respecto a los estudiantes de nuevo ingreso, las solicitudes entregadas en el Bouza se trasladarán automáticamente a la secretaría del Cotarelo sin necesidad de realizar ningún trámite a mayores.
Lo que sí se ha habilitado de forma excepcional es la posibilidad de que los alumnos del instituto de Fontecarmoa renuncien a la reserva ya realizada para poder solicitar plaza en otro IES de la ciudad, como por ejemplo el Castro Alobre o el Miguel Ángel González Estévez. El plazo expira el 21 de marzo.
En relación al trasvase de los 280 alumnos de Secundaria y Bachillerato del Bouza al Cotarelo, el gobierno vilagarciano espera que “se mantenga el compromiso del conselleiro de garantizar el transporte escolar” aunque no se cumple la distancia mínima de los dos kilómetros.
Fajardo anima a los padres a movilizarse al rechazar el traslado a Sobradelo
En Común es el único grupo municipal de Vilagarcía que ha reaccionado a la creación de un CIFP en la ciudad. Juan Fajardo no se anda con paños calientes y anuncia su rotunda oposición al traslado de los alumnos de ESO y Bachillerato del Bouza Brey al Cotarelo. Considera que “no responde a ningún criterio educativo ni social” y que “no tiene sentido en términos de movilidad y sostenibilidad”. “No se puede dejar a un barrio de más de 3.000 personas sin un centro de enseñanza obligatorio”, sentencia el portavoz de En Común, quien acusa al gobierno local de “cómplice”.
Advierte de que “trescientas familias tendrán que cambiar todas sus rutinas diarias de desplazamiento y organización para que sus hijos asistan a clase” y no se fía de que el transporte escolar prometido por la Xunta se mantenga en el tiempo debido a la distancia. “Animamos a los padres a demostrar su indignación contra esta decisión que se tomó sin que las familias fuesen escuchadas. Pensamos que es revocable si la comunidad escolar se moviliza”, concluye el concejal.