El alto número de casos positivos en COVID está teniendo una incidencia notable en el que siempre es un firme propósito de año nuevo. La voluntad de querer hacer más deporte para cambiar sus hábitos se ha topado de raíz este año con una pandemia que está aumentando más que nunca el volumen de contagios. Una realidad que se está reflejando en el enero más tibio que se recuerda en cuanto a número de altas en los centros deportivos y gimnasios de Vilagarcía.

La mascarilla es de uso obligado aunque exista suficiente distancia entre los usuarios. INAKI ABELLA DIEGUEZ

El uso obligatorio de la mascarilla además de la necesidad de guardar la distancia interpersonal son algunos de los componentes de una nueva normalidad que también ha obligado a reducir el número de alumnos en cada clase dirigida. Todo ello está reflejándose en un mes de enero mucho más tranquilo que en época prepandémica, en la que se trataba de un momento del año especialmente activo en cuanto a número de nuevos usuarios.

Muchas personas han preferido renunciar a acudir al gimnasio antes que vacunarse o verse obligados a testar su cargar vírica

Incluso en las actividades que organiza la Fundación de Deportes, el volumen de asistencia ha sufrido un forzoso descenso sustancial. Juan Miguel Doval, director deportivo de la entidad municipal, señala al respecto que “nuestras actividades cuentan con una mayoría de usuarios en una franja de edad avanzada. El 50% son mayores de 65 años y reconocen que el hecho de entrenar con la mascarilla es algo que ha causado cierto desapego por la actividad”.

En algunos de los gimnasios consultados también se confirma el enero menos activo en cuanto a número de nuevos usuarios. Ni siquiera las promociones de matrícula gratuita están teniendo el efecto que se esperaba, aunque lo que sí se percibe es un porcentual aumento en la edad de los nuevos usuarios.

Los habituales del gimnasio han preferido adaptarse a las circunstancias y a los protocolos. INAKI ABELLA DIEGUEZ

Manuel Santórum, monitor del gimnasio Wonder, hace referencia a que “tener un sistema inmune más fuerte pasa también por el ejercicio físico. Eso se hace notar en que hay gente mayor que en enero quiere tomar la costumbre de entrenar y este año se está notando respecto a que hay un porcentaje mayor que otros años”.

Otros gimnasios esperan a que se atenúe el aumento actual de los contagios para poder tener un febrero mejor en cuanto a número de altas. Son muchos los que señalen ésta como la causa principal de un arranque de 2022 que está muy lejos de parecerse a la habitual tendencia de empezar cada año con más hábitos saludables.

Los protocolos que detectan a los negacionistas

Una de las cuestiones que se viene repitiendo en los últimos meses son las bajas en algunos centros deportivos debido a las exigencias de los protocolos de acceso a las instalaciones. Actualmente, la normativa exige la presentación del certificado COVID o, en su defecto, la realización de un test de antígenos o una PCR con un máximo de 72 horas de antelación.

Estas exigencias han traído consigo que muchas personas hayan preferido renunciar a acudir al gimnasio antes que vacunarse o verse obligados a testar su cargar vírica. Javier Magariños, gerente de la piscina municipal de Vilagarcía, reconoce que “sorpresivamente están apareciendo bastantes negacionistas. Hay mucha gente anti-vacunas y también otros se niegan a hacerse los test. En algunos casos aluden a cuestiones de privacidad para no querer entregar ningún tipo de documentación sobre si tienen o no certificado de vacunación”. Incluso reconoce Magariños al respecto que “entre las bajas que puede haber en estos días a consecuencia de la pandemia, es mayor el número de las que se producen por no querer aceptar el protocolo, que aquellas que lo hacen por miedo al contagio”. Con una promoción de alta en el mes de enero, el gerente de la piscina tiene claro que “febrero empieza a ser un mes más favorable para las altas”.