El colegio Torre-Illa ha vuelto a ser objeto de actos vandálicos en los últimos días. Al igual que ha venido sucediendo en los últimos meses en ocasiones puntuales, los aficionados a utilizar el centro escolar para reuniones nocturnas ha aprovechado el parón lectivo para volver a dejar huella.
Ni siquiera una mayor vigilancia por parte de la Guardia Civil en horario nocturno a espantado a los jóvenes que utilizan los lugares cubiertos dentro del recinto escolar para sus botellones. El hecho de que en A Illa no haya servicio de Policía Local a partir de las 19.00 horas reduce la vigilancia del lugar al esporádico paso de una patrulla de la Guardia Civil, que todavía no ha podido encontrar a nadie en el interior del recinto.
Además de restos de colillas, botellas y recipientes de plástico, también se ha constatado diferentes agresiones contra el material del propio colegio
En esta última ocasión, además de restos de colillas, botellas y recipientes de plástico, también se ha constatado diferentes agresiones contra el material del propio colegio. Desde lo referido a macetas con golpes o desplazadas de su lugar habitual hasta desperfectos en la decoración navideña, especialmente en el patio del edificio dedicado a Educación Infantil.
Desde la dirección del centro ya se están barajando opciones para instalar dispositivos de vigilancia. Incluso se está planteando la posibilidad de disponer de unas cámaras de seguridad para terminar con la ocupación del colegio para acciones de este tipo.
Nuevo atentado contra la decoración navideña
La segunda madrugada del año trajo nuevos episodios de violencia contra la decoración navideña instalada en Vilagarcía. En concreto las letras del “Nadalízate” que lucen en la Praza da II República aparecieron en su mayoría rotas en la mañana de ayer. No es la primera vez que suceden casos como éste en las últimas semanas. Pintadas, desperfectos en luces y robos de elementos decorativos también se han convertido en otras expresiones vandálicas que han tenido lugar.
También se produjo una detención en la noche del primer día del 2022 debido a que un hombre destrozó los retrovisores de tres vehículos en la calle Pablo Picasso. Armado con un palo se ensañó con los espejos de los coches hasta que fue detenido por dos agentes de la Policía Local, si bien tras las correspondientes diligencias fue puesto en libertad.
