El “Día de Pedir” en A Illa es una jornada sagrada en la que los pequeños cobran protagonismo recorriendo las calles y llamando a cada portal para solicitar “unha esmoliña polos defuntiños que van alá”. Pese a ser una tradición que ya solo se conserva en A Illa, si coincide con jornada lectiva rara vez esta se suspende. Esa situación volverá a pasar el próximo martes ya que se mantiene la actividad escolar en el colegio Torre-Illa, algo que ha molestado a varios padres, favorables a que se suspendan.

“Se trata de una de las costumbres más arraigadas de este municipio, por eso creemos que se debería tener algo más de respeto a las tradiciones de los pueblos”, explicaba ayer un padre molesto con la decisión del centro escolar. “Insiste en que se trata de una tradición que “si poco a poco se le va quitando a los niños, acabará por perderse, por eso creo que los profesores deberían tener más mano izquierda y más visión a la hora de decidir convertir esta jornada lectiva en algo especial”. En esa postura se fundamenta también el hecho de que “a los pequeños les encanta un día como este, porque es una jornada muy señalada, y su atractivo puede verse en que, cuando coincide en fin de semana, A Illa está llena de niños de otras localidades”. En los últimos años, en los que la jornada ha sido lectiva, la mayor parte de los padres optan por no llevar al colegio a sus hijos, exponiéndose a recibir una falta de asistencia para que puedan vivir la emoción de recibir los caramelos.

Plátanos de Canarias

Por otra parte, la Agrupación de Mexilloeiros Illa de Arousa, cuya sede se encuentra en la avenida de Castelao, entregará a los más pequeños que pasen ese día por sus instalaciones un plátano de Canarias y material escolar. La decisión se adoptó en tres vertientes. Por un lado, se trata de ayudar a la isla de la Palma por todo lo que está soportando con el volcán de Cumbre Vieja, una forma de luchar contra el problema de la obesidad infantil por el consumo excesivo de azúcares industriales y, sobre todo, “una forma de volver a la tradición, ya que hasta no hace mucho tiempo, la gente entregaba a los pequeños fruta como manzanas, mandarinas o patatas”. Para conseguir los plátanos, la agrupación ha alcanzado un acuerdo con un supermercado local, mientras que el material escolar será adquirido en las librerías que hay en el municipio.