La Guardia Civil celebró ayer varios actos en la comarca para festejar el día de su patrona, la Virgen del Pilar, entre ellos oficios religiosos que se celebró en las iglesias de Santa Baia de Vilagarcía y de San Bieito de Cambados a las que asistieron agentes, familiares y amigos. La pandemia no permite todavía muchas más celebraciones par aun cuerpo que está pendiente de una serie de actuaciones y mejoras en las infraestructuras de las que dispone en la comarca de O Salnés.
En estos momentos, la Guardia Civil se encuentra a la espera de contar con un puesto en Vilanova de Arousa y con la renovación integral del antiguo cuartel de Cambados, así como saber qué va a ocurrir con las dependencias que posee en Vilagarcía.
En el primero de los casos, el de Vilanova, el Concello se encuentra realizando una serie de obras para acondicionar el local que van a utilizar una docena de agentes en la calle Aromas de Leyenda. Las obras está previsto que se finalicen en las próximas semanas por lo que las dependencias estarían habilitadas antes de que finalice el año. El teniente de alcalde, Javier Tourís, destacaba ayer el hecho de que “al fin, después de tantos años aguardando, vamos a volver a tener un puesto de la Guardia Civil en este municipio, algo que llevamos mucho tiempo reclamando porque se trata de una demanda histórica de nuestros vecinos; estará en funcionamiento antes de que finalice el año”.
Más complicado se antoja el regreso del cuartel de la Guardia Civil de Cambados. Demolido por su pésimo estado de conservación, la sede de la Guardia Civil se ha trasladado a las dependencias del centro social de A Mercede a la espera de que se finalice el proyecto. Este se encuentra pendiente de superar el visto bueno del Ministerio de Hacienda, que permitirá su salida a licitación. Cuenta con una partida de unos cinco millones de euros reservada y, antes de que finalice el mes de octubre, podría sacarse a concurso su construcción. Una vez sea adjudicado, antes de final de año, se iniciarán las obras de un inmueble que va a albergar a más de un centenar de agentes, al centralizarse la mayor parte de la actividad del cuerpo en esas dependencias. Las previsiones apuntan a que estará listo en el 2024. Samuel Lago, edil de Cambados, reconoce que “es una obra grande que va a tener un plazo de ejecución largo, pero que nos va a permitir contar con un cuartel moderno y adecuado a los tiempos actuales”.
Queda pendiente qué va a pasar con el cuartel de Vilagarcía, una infraestructura que, muy probablemente, acabará siendo desmantelada en el futuro, dejando tan solo el servicio de Fiscal y Fronteras para que se encargue de la vigilancia del Puerto de Vilagarcía. Esas dependencias se encuentran en un estado deplorable, y pese a los intentos por conseguir financiación para remodelar las instalaciones, nunca se ha redactado un proyecto serio para ello. El Concello de Vilagarcía quiere mantener este servicio en el municipio, e incluso, ha llegado a ofrecer otros terrenos para conseguirlo.
