El cuento se repite en los accesos a O Grove con cada ola de calor. Cientos de conductores se quedan atrapados en la vía rápida de Sanxenxo mientras ven, desde el atasco, como se descuentan del reloj las horas que pasarán en la playa. Este sábado, en el que se alcanzarán los 33º en la zona, las colas de coches ocuparon los siete kilómetros de la carretera de acceso a A Lanzada y O Grove y más de un kilómetro en la autovía de O Salnés.
Según relatan las personas atrapadas en el atasco alrededor de las doce del mediodía, el tráfico apenas se mueve. "Los coches están prácticamente detenidos", comenta un conductor. Y es que este problema se replica año tras año. La carretera que lleva a A Lanzada solo tiene un carril en cada sentido y se colapsa hasta la rotonda final, en la que los conductores pueden circular sin problemas hacia Sanxenxo pero sigue en caravana hacia O Grove.
Y no se terminarán aquí los problemas para la gente que esta mañana se encontró con esta gran congestión de tráfico. Por la tarde, cuando todos regresen se la playa se producirán retenciones semejantes en sentido contrario.
