La asociación de vecinos de Faxilde ha mostrado su indignación y enfado con el gobierno de Vilagarcía a tenor del enquistamiento de la situación al respecto del Campo da Fonte. Un terreno que los vecinos defienden que es de titularidad municipal y que reclaman para uso comunal en base a la investigación que iniciaron en 2019 consultando con distintos organismos.
Según explica Dolores Miramontes, presidenta de la asociación, “solicitamos una primera reunión con el Concello en diciembre y no se nos hizo caso. Protestamos públicamente y el alcalde nos recibió. Les entregamos todo el trabajo hecho de documentación y con una nota simple del Registro de la Propiedad donde se especificaba que el terreno era de titularidad municipal. Nos dijeron que lo cotejarían todo”.
Nos sentimos ninguneados, no nos hace caso a ninguna petición de reunión al respecto. Dijeron en su momento que lo iban a solucionar y seguimos esperando
La sorpresa de los vecinos fue que posteriormente a esa reunión, y tal y como explica su presidenta, “vino un camión del Concello y puso quince piedras en el terreno limitando el uso vecinal a un paso estrecho cuando está demostrado que el uso comunal corresponde a 232 metros cuadrados más otros 13 que ocupa el lavadero”.
La queja no se hizo esperar, “entonces desde el gobierno se nos reconoce que se había medido mal el espacio para uso de los vecinos, pero eso fue en enero. Y desde entonces siguen allí las piedras dando más espacio para los particulares lindantes que para el disfrute de los vecinos y nosotros sin tener noticias del Concello para nada”.
El problema son las formas porque podían llamar y decir que tienen mucho trabajo y que no nos pueden atender, pero ni eso
Según Dolores Miramontes, se ha reclamado la atención municipal sobre este asunto en varias ocasiones, pero sin éxito. “Nos sentimos ninguneados, no nos hace caso a ninguna petición de reunión al respecto. Dijeron en su momento que lo iban a solucionar y seguimos esperando”, apunta la portavoz de los vecinos de Faxilde.
El enfado con el proceder del gobierno local se centra en que “el problema son las formas porque podían llamar y decir que tienen mucho trabajo y que no nos pueden atender, pero ni eso. Parece que quieren que nos olvidemos de todo y no lo vamos a hacer”.
