El gobierno socialista de Vilagarcía dio ayer luz verde al reglamento que sienta las bases para crear una red de voluntariado municipal. Y lo hizo con el rechazo unánime de la izquierda y el apoyo de la derecha, si bien la iniciativa en ningún momento estuvo comprometida gracias a la mayoría absoluta de la que goza el PSOE (12 de 21 concejales).
La más crítica fue la portavoz de Podemos-Marea da Vila. María de la O Fernández recordó que “la línea entre lo que es el voluntariado y el trabajo profesional muchas veces es difusa, como ocurre en este reglamento”.
“El voluntariado tiene que ver con situaciones puntuales y sobrevenidas”, añadió la concejala, que al igual que En Común y el BNG, apostilló que el voluntariado ya está regulado “desde otras instituciones” y “son bastante garantistas”, por lo que ninguno de los tres partidos ve necesario hacerlo también en la esfera municipal.
Otras ciudades
Desde el ejecutivo local, la portavoz y concejala de Servicios Sociales, Tania García, recordó a la oposición que reglamentos similares ya están en funcionamiento en ciudades y pueblos como Vigo, A Coruña, Pontevedra (“gobernada por el BNG”, espetó) o A Pobra do Caramiñal, y que la necesidad de crear este documento surgió en una reunión celebrada en octubre con las entidades y personal de Servicios Sociales.
“Los voluntarios tendrán formación previa, un seguro de accidente y responsabilidad civil y estarán bajo la supervisión de los técnicos municipales”
“Los voluntarios tendrán formación previa, un seguro de accidente y responsabilidad civil y estarán bajo la supervisión de los técnicos municipales”, comentó la portavoz socialista, que se mostró su “voluntad negociadora para recoger aportaciones”, pero ya en la fase de alegaciones (entre la aprobación inicial y la final).
A Lucía César Veloso (BNG) no le parece apropiado que el gobierno haya llevado el reglamento al pleno “sin contar con la opinión de los grupos”, por lo que “cuando menos, nos da que sospechar”.
"Trabajo espontáneo"
Por su parte, Jesús López (En Común) cuestionó varios aspectos del documento, entre ellos el concepto de voluntariado, que “debe ser un trabajo espontáneo”.
Donde sí logró apoyos el equipo de Varela fue en el sector más conservador de la corporación (PP y Cs).
En el debate, Ana Granja reconoció que “no encontramos grandes problemas para aprobar este reglamento”, al tiempo que destacó el carácter solidario de los vilagarcianos, especialmente de los jóvenes. Terminó su alocución echando un capote a María de la O Fernández, apoyándola “ante la reacción airada que el gobierno tuvo en la prensa”.
División en el seno del PP
Así, los cinco ediles del grupo popular votaron a favor del reglamento, una postura que no es compartida por todas las cabezas visibles del partido, pues el presidente de Nuevas Generaciones considera que el documento sirve para “aprovecharse de la gente para realizar labores que tendría que realizar el Concello”, según expresó en redes sociales.
El alcalde cerró las intervenciones, justificando que la urgencia de llevar el reglamento a pleno se debe a la actual pandemia y descartando que los voluntarios vayan a asumir el trabajo de los empleados municipales. Leyó extractos de la legislación actual para sentenciar que “la ley es muy clara, tanto la autonómica como la estatal”.
Aprobado el plan personalizado de pago de impuestos y la petición de mejoras a ADIF
A excepción del reglamento de voluntariado, los demás puntos de la orden del día del pleno de enero no generaron un gran debate, pues dos de las tres mociones se aprobaron por unanimidad.
La única que salió adelante sin el apoyo de todos los grupos fue la del BNG en la que solicitaba un “canal Xabarín en la TVG” y más y mejor difusión de programación infantil y juvenil en gallego, una propuesta que no fue del agrado del PP. La edil de Hacienda, Luz Abalo, se encargó de explicar el plan personalizado de pago de impuestos que se pondrá en marcha en breves al haberse aprobado por unanimidad la nueva ordenanza fiscal general (nº 4).
Se trata de que los vilagarcianos puedan asumir sus obligaciones fiscales con mayor flexibilidad, con pagos fraccionados. Los interesados tienen de plazo hasta el 30 de abril para solicitarlo y este año los abonos se realizarán de forma mensual entre el 5 de junio y el 5 de noviembre, si bien a partir de 2022 se ampliarán las modalidades (trimestral, semestral, etc.).
El importe de la deuda debe superar los 100 euros y las cuotas (de un mínimo de 15 euros al mes) se domiciliarán en una misma cuenta bancaria. Toda la corporación aplaudió una iniciativa que se llevaba tiempo solicitando desde distintos grupos, si bien propusieron que se pudiese justificar de algún modo que la persona está al corriente de pago para poder acceder a otras ayudas.
El alcalde, Alberto Varela, admitió que “seguro que habrá errores”, pero que lo importante es que este “compromiso electoral” que “dará muchísimas facilidades a los vecinos de Vilagarcía” se haya materializado. La moción del PP para solicitar a ADIF que acondicione el aparcamiento de Rosalía de Castro y revise los pasos a nivel del municipio también fue aprobada por unanimidad. A petición del PSOE, Granja aceptó retirar la parte en la que pedía que fuese el Concello el que asumiese la obra del parking si ADIF no lo hacía.
