La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra acoge los próximos días 10, 11 y 12 de noviembre el juicio por Jurado contra un policía local de Vilagarcía acusado de un presunto delito de cohecho. La FiscalÍa solicita para Marcial A. A. cuatro años y medio de cárcel y nueve de inhabilitación en su empleo como funcionario por supuestamente haber cobrado 2.000 euros de un conductor que dio positivo en alcoholemia a cambio de no tramitar el atestado. El Ministerio público también solicita una multa de 18 meses a razón de 15 euros diarios.

Los hechos ocurrieron hace siete años, en 2013. Según recoge el escrito de acusación, sobre las 02.55 horas del 12 de septiembre el agente se encontraba de servicio, uniformado y acompañado de otro policía local, ya que las patrullas se realizan en pareja. Los funcionarios municipales fueron comisionados para trasladarse a la calle Colón, en el centro de Vilagarcía.

Allí se encontraban compañeros de la Policía Nacional, que habían dado el alto a un BMW X5 por la posible comisión de una infracción administrativa, ya que su conductor, Óscar C.P., presentaba síntomas de estar bajo los efectos del alcohol. Por tanto requirieron la presencia de la Policía Local para efectuar la pertinente prueba.

El resultado del etilómetro fue de 0,83 ml/l en la primera medición realizada a las 03.23 horas y de 0,81 ml/l en la segunda, media hora después.

El fiscal relata en su escrito que el agente que ahora se enfrenta a un juicio acudió diez días después al domicilio del conductor, situado en Vilagarcía, y “le hizo el ofrecimiento de no tramitar el expediente por el delito de conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas a cambio del pago de 5.000 euros, que debía entregarle personalmente, fijando a tal efecto una cita para el día 10 de octubre de 2013 que tendría lugar en el parking del centro comercial Arousa”.

Ese día, Marcial A.A. y Óscar C. P. se reunieron en el lugar acordado sobre las dos de la tarde, pero el conductor le habría dicho al policía que solamente podría entregarle 2.000 euros y este rechazó el trato, ya que no era la cantidad de la que habían hablado inicialmente.

Abandonaron el lugar y al cabo de un rato el agente llamaría por teléfono a Óscar C. “diciéndole que finalmente aceptaba el trato por la cantidad de 2.000 euros y le emplazó para su entrega el día 14 de octubre de 2013” en el domicilio del conductor. “Ese día, sobre las 10.30 horas, en las proximidades del domicilio de Óscar C.P., se reunieron haciendo entrega a Marcial de la cantidad pactada en un sobre, a cambio de no tramitar el atestado por el delito de conducción alcohólica y de que no llegara al juzgado y el señor C. pudiera eludir sus responsabilidades penales por el delito contra la seguridad vial”, reza la calificación fiscal.

Así las cosas, el atestado por conducir bajo los efectos del alcohol contra O.C. no fue inicialmente tramitado, “siendo necesario reproducir dichas diligencias para conocer de este delito en procedimiento separado”.

El Ministerio público apunta que en el momento de los hechos, en septiembre de 2013, “no existían suficientes garantías en cuanto a la custodia de los atestados en las dependencias de la Policía Local de Vilagarcía de Arousa”.