El gobierno socialista de O Grove incide en una vieja idea llamada a mejorar la gestión de los residuos. Se trata de la puesta en marcha de su propia planta de compostaje, que cuenta con una aportación de 37.000 euros procedente de la Consellería de Medio Ambiente y nace para afrontar la recogida separada de los productos orgánicos susceptibles de ser sometidos al proceso de compostaje.

Es la edil Ángeles Domínguez la encargada de presentar esta iniciativa, dotada con un presupuesto total de 47.208 euros y que estará arropada por una campaña de información y sensibilización.

Como edil responsable de Medio Ambiente, es ella quien se ocupa de explicar a los vecinos que se trata de “un modelo de recogida selectiva puerta a puerta de la materia orgánica para su posterior tratamiento en la planta de compostaje municipal que se construirá al efecto, reforzando así el ya importante sistema de compostaje del que disponemos”.

Colectores QR

Para esa recogida puerta a puerta de orgánicos se utilizarán colectores de entre 240 y 300 litros que estarán identificados con códigos QR que permitirán realizar un seguimiento del proceso.

Los productores individuales participantes “podrán emplear cubos de entre 40 y 80 litros, de tal forma que puedan trasladar los residuos orgánicos de forma más sencilla al colector de mayor tamaño”.

Tres días a la semana

La propia edil resalta que “la recogida se realizará inicialmente los lunes, miércoles y viernes, encargándose el personal municipal de intercambiar los colectores llenos por otros vacíos y limpios”.

Los biorresiduos serán llevados a la planta de compostaje, situada en las inmediaciones del punto limpio, mediante un camión con grúa, “estableciéndose una ruta que permita la máxima eficacia en su recogida”.

Se utilizará para el depósito una zona pavimentada de unos 1.250 metros cuadrados “en la que se establecerán tres zonas diferenciadas, una para descomposición del material, otra denominada ‘trinchera de maduración’ y una tercera en la que separar el compost final del material recirculante”.

Aguas residuales y árboles

Dichas instalaciones “dispondrán de una captación de aguas residuales que bordeará todo el perímetro y dispondrá de una zona arbolada”, explica la concejala, al tiempo que lo define como “un modelo que supone una gran ventaja a nivel medioambiental, económico y social”.

Prueba de ello es que la previsión inicial dice que con este sistema de recogida y separación de la materia orgánica para explotar el compostaje y obtener un abono de calidad realizará un tratamiento de 660.000 kilos, de los que se obtendrán unos 140.000 de compost.