| A mediodía de ayer, en la parroquia vilanovesa de Tremoedo, se produjo un incendio que requirió de la rápida y efectiva intervención de los bomberos para ser sofocado. La peligrosidad del hecho radicaba en la cercanía del foco respecto a un núcleo de viviendas. La alerta dada por los vecinos del lugar fue clave para su rápida extinción sin apenas consecuencias materiales en el balance de daños. Fue el tubo de escape de un vehículo el que prendió la primera chispa. El conductor estaba realizando una maniobra en una zona rodeada de maleza seca y el golpe de la parte trasera contra un árbol originó un pequeño fuego que enseguida se extendió al maletero del coche así como a la maleza seca, empezando a propagarse de manera muy rápida debido a las altas temperaturas. La intervención de un helicóptero que descargó agua terminó por controlar toda la situación.