La veda del centollo arranca este sábado, y por tanto ya no habrá oportunidad de saborear hasta el otoño uno de los productos más destacados de las rías gallegas. Pero los amantes de la buena mesa encontrarán fácil consuelo, ya que el 1 de julio comienza la temporada de pesca del pulpo y de la nécora.

Se trata de dos de las campañas más esperadas del año, sobre todo por parte de los hosteleros, ya que son productos con un enorme tirón en Galicia, especialmente entre los turistas.

El hecho de que la nécora y el pulpo regresen a las mesas puede contribuir también al desarrollo de la llamada "nueva normalidad", sobre todo si la pandemia por el Covid-19 se mantiene bajo control y la actividad aumenta en los establecimientos hosteleros.

Ni que decir tiene que el inicio de estas dos campañas favorece, igualmente, a los pescadores que largan las nasas de pulpo y de nécora, ya que el cefalópodo fue capaz de generar en la segunda mitad del pasado año unos ingresos de más de 9 millones de euros (1.232 toneladas) y el citado crustáceo rondó en la comunidad los 2 millones de euros en primera venta (111 toneladas).

En definitiva, que el pulpo pide paso en los puertos, lonjas, plazas de abastos, supermercados, pescaderías y restaurantes después de completar una veda de apenas un mes, mientras que la nécora entra en escena tras permanecer a salvo de las nasas -no tanto de los furtivos- desde el pasado 5 de enero.

Y por cierto, que junto a estos productos también empezará a pescarse el 1 de julio un crustáceo tan interesante como el bogavante, que permanecía en veda desde el 31 de marzo.

En la segunda mitad de 2019 este preciado marisco generó en las lonjas gallegas 297.000 euros, gracias a la comercialización de casi once toneladas.