Los niños adquieren un protagonismo especial en la fiesta religiosa de la Candelaria, cuando se bendicen las velas "para alumbrar a los que no llegaron a nacer o fallecieron antes de ser bautizados". Así se hizo ayer, por ejemplo, en Cambados y Valga, en este último caso coincidiendo la misa posterior a la "Procesión de los lacones" con el bautizo de dos mellizos. Hay que tener en cuenta que la Candelaria se celebra, según el santoral católico, en recuerdo del pasaje bíblico de la "Presentación del Niño Jesús en el Templo de Jerusalén" y la purificación de la Virgen María después del parto.

Por la tarde continuaba esa presencia infantil en la actividad cristiana desplegada en los municipios de O Salnés y el Ullán.

En la villa cambadesa, sin ir más lejos, se organizó a media tarde la no menos importante "presentación de los niños ante la Virgen", antes de una misa y la procesión de la Candelaria.

En ella también participó la imagen de San Blas, que en Cambados se festeja hoy con la bendición de panes, a las 11.00 horas, y nueva misa, seguida de procesión, a las ocho de la tarde.