La pasarela que se había retirado en la vía rápida VG-4.2 se ha vuelto a instalar en su antigua ubicación después de los trabajos de reparación. La infraestructura, que se encontraba deteriorada y en mal estado, fue retirada y trasladada a un taller de reparación para preparla para un uso seguro. En total, en el acondicionamiento de la estructura, la Xunta de Galicia destinó, en palabras del delegado territorial Cores Tourís, cerca de 42.000 euros.
El propio delegado comprobó en la mañana de ayer el final de los trabajos de mejora de la pasarela de Vilariño, en Cambados. A Cores Tourís le acompañaron Fausto Núñez, jefe de la Agencia de Infraestructuras en Pontevedra y Luis Aragunde, portavoz del PP en Cambados. Los tres responsables se acercaron para observar el final de las obras, la reposición de los perfiles metálicos nuevos y la apertura al público en el mismo lugar en el que se encontraba anteriormente, en el punto kilométrico 2+640 de la VG-4.2.
