En SEO/BirdLife consideran que la sociedad está obligada a aprender de accidentes marítimos como el del Prestige para evitar nuevos daños al ecosistema. Por eso ahora el coordinador del Programa Marino de la organización, su presidente, uno de los técnicos del Área de Políticas Ambientales, el coordinador de las prospecciones de playas en el proyecto FAME y el delegado territorial de SEO en Cantabria inciden en que "los impactos de una marea negra no se limitan a la mortalidad directa de varias decenas (o centenares) de miles de aves", sino que se trata solo de "la punta del iceberg".

Y es que "los efectos sobre el ecosistema en su conjunto son mucho más graves y afectan de forma indirecta a un mayor número de aves" a causa de aspectos como "la persistencia de contaminantes o el agotamiento de presas".

Esto supone que mientras temporales como los registrados este invierno afectan principalmente a las aves más inexpertas o en peor condición física, "los vertidos de hidrocarburos probablemente tienen un impacto más azaroso, afectando tanto a aves débiles como a otras en buena condición".

Asimismo, "una marea negra puede afectar con mayor facilidad a especies con estrategias de vida más 'conservadoras', y por tanto preparadas para resistir temporales pero no vertidos de crudo".

Del mismo modo, en SEO aprovechan para recordar que a las mareas negras y los temporales hay que sumar "las capturas accidentales en artes de pesca", pues se trata de "una de las principales amenazas para las aves marinas, por afectar a la supervivencia adulta".

Los ornitólogos aclaran que "tal vez no supongan un impacto tan espectacular como el de los temporales o las mareas negras, pero las capturas accidentales representan un goteo constante de aves muertas, y no necesariamente las que están en peor condición física".

Lo peor es que "en ocasiones se producen capturas masivas". Tanto es así que "en casos extremos se ha llegado a describir la captura de varios centenares de aves en una sola operación de pesca, aunque no es lo más frecuente".

En SEO terminan diciendo que "se estima que unas 200.000 aves marinas mueren anualmente en Europa por esta causa, algo equiparable a lo que ha pasado con los temporales y a lo que pasó con el Prestige; pero esto ocurre año tras año, y en muchos casos afecta a las especies más sensibles".