La asociación BATA ha renovado su convenio de colaboración con los Ayuntamientos de Vilagarcía y Ribadumia para la formación de brigadas forestales, que estarán integradas por personas con discapacidad.
La brigada de Ribadumia es de tres personas con discapacidad intelectual, y ayer empezaron a trabajar junto al puente de "Os Padriños", en Ponte Arnelas, limpiando el sendero peatonal que hay a orillas del río Umia.
Al acto acudieron la alcaldesa, Salomé Peña, e Ignacio Rey, que es el coordinador del servicio de empleo de BATA. En el caso de Vilagarcía, está previsto que su brigada empiece a funcionar la próxima semana.
Los trabajadores de Ribadumia tienen entre 26 y 40 años, y realizarán sus funciones hasta final de año. Ignacio Rey sostiene que "estos equipos tienen un doble objetivo: la recuperación de los espacios naturales y sobre todo la creación de oportunidades de inclusión social y laboral para las personas con discapacidad". Rey añade que "ellos se sienten a menudo ciudadanos pasivos, pero lo que quieren ser es activos y contribuir al desarrollo de la sociedad". Este es el tercer año que Ribadumia tiene una brigada de BATA. La asociación logró en otros equipos la inserción laboral en empresas de dos discapacitados.
