La corporación municipal de O Grove celebró anoche una de sus sesiones plenarias más breves, al contar con la presencia de los afectados por las preferentes. Solo uno de los once asuntos incluidos en la agenda de la sesión fue abordado por razones de urgencia, antes de decretarse la suspensión del pleno. Los concejales del tripartito y el representante del BNG aprobaron el convenio de teleasistencia domiciliaria con la Diputación de Pontevedra, un trámite que urgía para la prestación del servicio.

La sesión plenaria se inició sobre las ocho de la tarde, pero la corporación municipal se encontró entre el público con algo más de una veintena de personas con pancartas y camisetas identificativas del colectivo de afectados por las preferentes de O Salnés.

Los asistentes intentaron interrumpir el pleno con cánticos como "Non pararemos ata que todos cobremos" y silbatos que hacían difícil la normal continuidad del debate.

Ante esta situación el alcalde Miguel Pérez, llamó a los portavoces de los tres grupos de la oposición para comunicarles su intención de limitar la sesión a la aprobación del convenio para el que acababa el plazo de adhesión. Pero los concejales socialistas y el representante de EU decidieron abandonar el pleno sin participar en ningún debate en solidaridad con los afectados por las preferentes. El portavoz socialista, José Antonio Cacabelos, se dirigió a los afectados para informarles de que su grupo abandonaba el salón en solidaridad con ellos.

El único representante de la oposición que quedó en el pleno fue el edil del BNG Heladio Outeiro, quien apoyó la propuesta del gobierno tripartito, indicando que se quedaba a votar el asunto por responsabilidad.

En O Grove hay actualmente 17 personas adheridas al sistema de teleasistencia domiciliaria que, hasta el año pasado contaba con financiación del Imserso. Pero al retirarse esta ayuda, la Diputación de Pontevedra ofreció un acuerdo a los municipios de menos de 20.000 habitantes para sufragar un 34% del coste del servicio, en tanto que el esto debe ser asumido por la Administración Local. De este modo los usuarios, generalmente personas mayores que viven solas, no tendrán que pagar por esta prestación.

Una vez aprobado el convenio con la Diputación, el alcalde levantó la sesión, dejando para otra ocasión el resto de los asuntos incluidos en la orden del día del pleno.