La llegada de la primavera provocó la reaparición de problemas en las zonas de movida nocturna de la comarca de O Salnés. Excederse con el horario fijado en el decreto de la Xunta de Galicia provocó que la Policía Local de Cambados denunciase a todos los establecimientos hosteleros ubicados en una de sus calles más emblemáticas. En total, fueron denunciados siete locales, entre bares, pubs y discotecas.
El sargento responsable del departamento municipal, José Manuel Duarte Solla, espera que se trate de un hecho puntual. Personalmente lo achaca, en gran medida, al hecho de que el pasado sábado se produjese el cambio horario. Aunque a las dos eran ya las tres, cree que los responsables de la mayoría de los establecimientos optaron por hacerse los despistados, obviaron cambiar sus relojes y al llegar la hora del cierre decidieron disfrutar de una hora más.
Pero en esto, los agentes cambadeses se mostraron inflexibles: "En otoño, cuando se atrasa la hora son ellos los primeros que te recuerdan que tienes obligación de regirte por el horario oficial. Pues ahora, ocurre lo mismo. La hora es la que es y nosotros no tenemos la culpa de que el cambio se realice a las dos de la mañana y no a las seis", razona Duarte.
En su opinión, los propietarios de los establecimientos de la calle sancionada controlaron el proceder del resto de locales "y como el de al lado no cerró pues ellos tampoco".
La Policía Local empezó sancionando a los bares que, según el decreto, son los que disponen de menos tiempo. Después a los pubs y, a las cinco y media de la madrugada, a la discoteca ubicada en esa misma calle. Desde la Policía Local entienden que su trato con los establecimientos nocturnos es de lo más exquisito "pues, por ejemplo, en el caso de las discotecas nos limitamos a denunciar a las que siguen abiertas a las cinco y media de la madrugada sin entrar en las diferenciaciones que establece el decreto autonómico".
Dicho decreto recoge, para este tipo de establecimientos la obligatoriedad de cerrar a las 4.30 de la madrugada y les amplía media hora los fines de semana. Por último les da otra media para proceder al desalojo de las instalaciones, aunque en este último tramo no se les permite ni tener música ni servir copas y se les obliga a encender la luz:
"Nosotros ya no vigilamos si siguen sirviendo copas o si el cliente de la barra se está apurando la que pidió hace una hora. Somos bastante flexibles con eso pero, eso sí, a las cinco y media en punto tienen que cerrar". La Policía Local de Cambados explicó además que se trató de una noche muy concurrida.
En O Grove también pero según manifestó la edil de Seguridad Ciudadana, Ana Isabel Domínguez, apenas se registran denuncias desde que, hace poco más de un año, los problemas originaron una reunión entre concello y hosteleros en la que se alcanzó una entente.
Desmanes en el casco urbano de Vilanova y en A Illa
Vilanova vuelve a revivir nuevos desmanes nocturnos durante los fines de semana, algo que preocupa sobremanera al alcalde del municipio, Gonzalo Durán, que ayer lamentaba que menores de edad pudiesen andar por el casco urbano a las ocho de la mañana destrozando todo lo que encontraban a su paso. El regidor considera que la Guardia Civil debería tener más presencia en el municipio, especialmente en las parroquias más alejadas ya que "en el casco urbano, los agentes de la Policía Local, pese a ser pocos, están realizando un importante trabajo en la prevención de los desmanes del fin de semana y de los robos que puedan registrarse". El último de ellos acabará en la Fiscalía de Menores después de que se haya identificado a los jóvenes que presuntamente destrozaron una escultura en el Xardín Umbrío y después una máquina expendedora en la plaza de abastos. Los tres jóvenes fueron sorprendidos por un policía local de paisano.
Otro punto en el que existen quejas por la "movida" nocturna es A Illa, donde vecinos de O Campo y O Regueiro exigen al gobierno municipal que vigile la actividad de varios locales de copas en los que se han registrado numerosos incidentes en forma de peleas.
Además, los vecinos de la zona denuncian que no se respetan los horarios de cierre y que los locales no están correctamente insonorizados por lo que la música les impide conciliar el sueño durante todo el fin de semana, especialmente, en las madrugadas del domingo.
Vilagarcía prevé cierres esta semana por no tener licencias
Superados los problemas del pasado año, Vilagarcía también está registrando una movida tranquila. Por decisión de la Subdelegación del Gobierno su control corresponde ahora en exclusiva a la Policía Local. Así lo recoge el convenio de colaboración entre cuerpos firmado en la última Junta Local de Seguridad. Se ponen fin así a polémicas como la surgida cuando la Policía Nacional ordenó el cierre de varios pubs que habían superado el horario.
Ahora, la Policía Nacional no va a denunciar ni por niveles de ruido ni por incumplimiento de horario. Esa tarea quedará en manos, exclusivamente, de los agentes municipales. Y será el alcalde el que sancione y ordene los precintos si lo considera conveniente por acumulación de denuncias. Por el momento, no se ha decretado ningún cierre por este asunto. Es más, en los últimos meses apenas se han tramitado media docena de denuncias por horarios o ruidos.
La alcaldía, en cambio, sí ha decretado el cierre de varios establecimientos por incumplir los requisitos que exigía su licencia de apertura.
Las razones varían de un local a otro y van desde la carencia del alumbrado de emergencia, hasta la falta de precintos que controlen el sonido de los equipos de música o la no presentación del certificado de insonorización.
El concello permitió a la mayoría de estos locales la apertura provisional mientras tramitaban la correspondiente licencia. Pero al mismo tiempo se les indica cuál es la documentación que tienen que presentar para conseguirla y se les da un plazo. Si cumplido éste no presentaron todo lo exigido, el alcalde decreta el cierre.
Para esta semana estaban previstos 15, aunque cuatro propietarios ya evitaron la medida presentando la documentación requerida. El resto tendrán que hacerlo antes de mañana sino quieren enfrentarse al precinto policial. Y es que presentar toda la documentación exigida deja sin efecto el decreto.
