Los residentes en el Caleixón da Parra, en Cambados, se han vuelto a quejar por las molestias que les ocasionan los jóvenes durante los fines de semana.

Hace un año, los vecinos ya pidieron ayuda para erradicar los "botellones" de esa zona, y transcurrido ese tiempo, vuelven a alzar la voz de protesta.

Los residentes lamentan sobre todo los ruidos de los jóvenes que se quedan en la calle. Pero también están muy molestos por el estado de abandono en que se encuentra sumida la zona. Denuncian la existencia de pintadas en las paredes, y que las canalizaciones del desagüe llevan rotas varios meses por culpa de actos vandálicos.

Así las cosas, reclaman a la Policía Local y a la Guardia Civil mayor vigilancia en la zona, y también piden que se controle el volumen del sonido de la música de dos pubs que se encuentran en ese callejón.

"Estamos empezando a hartarnos otra vez. El año pasado hubo gente que dijo que se quería ir de allí, porque los fines de semana es imposible descansar, y ahora parece que habrá que amenazar otra vez con lo mismo", señaló una afectada.

Más limpieza

Los residentes comprender que la policía no puede acudir cada vez que se los llama, porque los fines de semana suelen tener mucho trabajo.

Pero lo que ya no parecen comprender tan bien es el estado de limpieza de la calle. Los vecinos afirman que el Caleixón da Parra está lleno de basura de cristales rotos casi todos los domingos, y reclaman al concello una solución.

En lo que atañe a la policía, los afectados les piden que identifiquen a los jóvenes que se congregan en el Caleixón da Parra "porque muchos son de Cambados y tenemos miedo a denunciarles. Pero hay veces que se ponen a gritar de noche, a tirar vasos contra las casas, o a timbrar a las puertas. Tenemos niños pequeños, y estamos preocupados". Al parecer, en esa zona, donde se juntan docenas de jóvenes, también se consume droga en la calle.

Los afectados aseguran que no tienen nada en contra de la movida, y que no se opondrían a los botellones, siempre y cuando los jóvenes respetasen unas normas básicas de convivencia, y no causasen molestias.