Los pescadores de río ya tienen preparados aparejos y equipos. El 18 de marzo se abrió la temporada de trucha, que rematará el 31 de julio, aunque la modalidad de pesca sin muerte se extenderá un poco más. Es un pescado rico en proteínas, vitaminas y hierro, con un bajo contenido graso y escaso índice de calorías, apto en cualquier dieta y sabroso en todos los platos.
"Galicia es el país de los diez mil ríos -refiere Cunqueiro-, unos grandes, otros medianos, otros pequeños, otros regatos que bajan desde los montes a las vallinas y valles (?) Y ya voy diciendo la nómina de peces de los ríos nuestros, fértiles en truchas. Las mejores son las de los meses que van de abril y mayo hasta la veda". A don Álvaro le gustaban fritas, "rebozadas en harina de maíz". Y para ello, explica, en el aceite "se echan unos trocitos de unto o un poco de jamón con blanco".
Los que escribieron de buenos sabores gustan de las "tres efes" de las truchas; esto es, "frescas, fritas y frías", como recoge Ángel Muro en "El practicón" y doña Emilia -Pardo Bazán- en "La cocina española antigua". Reconociendo que a la trucha le sienta bien la sartén, también es cierto que resulta apetitosa en escabeche, a la plancha -con jamón-, asada al horno o marinada. Igualmente en sopa, como hacen en algunas poblaciones de Castilla.Y debían gustar a Cela que, en su "Viaje al Pirineo de Lérida", dice haber rendido el tenedor "en la trucha veinticinco".
En tiempos, fue uno de los pescados más consumidos y apreciados por la población, y gozó del favor en las mesas reales. Abundaba la "pintona", natural del país, mucho antes de que la arco iris fuese repoblando ríos y piscifactorías.
Siguen siendo objetivo deseado de los aficionados a la caña, que cada temporada recorren ríos y arroyos con la esperanza de regresar con las mejores piezas. Dicen los entendidos que el Verdugo -junto a su afluente el Oitavén- es uno de los mejores ríos trucheros de Pontevedra, donde habita la pintona, además del Neira, en Lugo o el Avia en Ourense, incluyendo el Miño y sus tributarios a su paso por diferentes cotos de las tres provincias que recorre. También el Mandeo en A Coruña, entre otros muchos. Esperan que mayo y junio sean los meses de mayor captura porque ahora la frialdad de las aguas hace que las truchas se escondan bajo las rocas y no suban a la superficie.
