El cantante español David Bisbal dijo ayer que con el disco "Hijos del mar", su sexto álbum de estudio, quiso hacer algo nuevo en su carrera, hacer "algo que no todo el mundo hace".
En un hotel en San Juan, frente a las aguas de la isla caribeña, Bisbal se reunió con los medios de comunicación para promocionar "Hijos del mar" antes de viajar a México, donde participa en "La apuesta", un programa de la cadena Televisa que busca lanzar un nuevo cantante con la ayuda de figuras del espectáculo.
"No quería que todos mis discos sonaran igual", aseguró el intérprete, para quien este trabajo introduce ritmos electrónicos, que son una novedad positiva respecto a trabajos previos.
Considera que "hay que renovarse" y por eso el objetivo de "Hijos del mar" era no repetirse en su tradicional estilo pop con reminiscencias latinas.
"Me aventuré a canciones más universales", subrayó el almeriense, aunque aclaró que eso no quiere decir que se aleje del público de países donde tradicionalmente ha tenido más éxito como México, Argentina, Estados Unidos o Centroamérica.
El cantante español recordó que para sacar el nuevo disco trabajó con gente del norte de Europa que le ha aportado cosas nuevas en lo relativo a ritmos, pero que el hecho de que el disco se grabara en español terminó por darle un evidente carácter familiar que agradecerá su público más habitual.
"Quería alejarme del pop latino", dijo Bisbal, que por eso viajó a lugares como Suecia, Reino Unido o Los Ángeles en busca de inspiración, donde colaboró con personas que le ayudaron a obtener un sonido de corte más electrónico.
De los temas del disco, destacó que "Duele Demasiado" está dedicada a todos los niños que se han visto obligados a huir de los conflictos armados y desastres naturales.Bisbal colabora desde hace años con Unicef, lo que le ha hecho estar más concienciado con los desastres humanitarios.
