El actor estadounidense Richard Gere se asomó ayer a la otra cara de San Sebastián, la de los desheredados, para apoyar el trabajo de la Fundación Rais en un centro de día para personas sin recursos que gestiona esta entidad, de la que su pareja, la gallega Alejandra Silva, es madrina. Apenas dos horas después de llegar a la ciudad, el artista estadounidense hizo su primera aparición pública en un escenario alejado de focos, trajes de gala y alfombras rojas.

Acompañado de su pareja y recibido por el alcalde de la ciudad, Eneko Goia, el actor llegó al centro de día que la Fundación Rais gestiona en el centro de Donostia para sensibilizar sobre la causa de las personas sin hogar, en la que se centra la película "Invisibles", que presenta en el Festival de Cine.

Tras saludar a varias admiradoras que se habían enterado de la visita, Gere se acercó a los medios de comunicación para valorar el trabajo de las personas que trabajan con los homeless"día a día". "Yo puedo hacer una película, puedo viajar alrededor del mundo, la gente viene a hacer fotos y hablamos sobre ello, pero esta gente, que trabaja en las calles todos los días, cuando no les apetece, cuando están cansados, cuando las cosas no van bien, estas personas son a las que queremos apoyar", ha manifestado el actor.

Ha recordado que una persona sin hogar de Nueva York con la que colaboró para rodar la película, puesto en pie, tras ver la cinta, exclamó: "Quiero que todo el mundo sepa que nosotros también somos seres humanos".

"Ese es el mayor mensaje. Todos somos seres humanos. Unas veces estamos arriba, otras veces abajo, unas veces somos estrellas de cine, otras veces no, pero todos somos seres humanos", afirmó el protagonista de "American Gigoló" y "Pretty woman".