Que el vigués Pablo Perozo triunfe a lo grande en el mundo de la música es cuestión de "Tiempo". Así se titula el disco que tiene ya en el mercado y en su web, un trabajo de enorme exuberancia rítmica y melódica, deslumbrante calidad y unas letras que encajan como un guante en las canciones.
Ya hablamos hace un año de "Tiempo", y ahora Lesuit vuelve a su ciudad para presentar, con músicos amigos invitados, estas canciones y alguna nueva. Será mañana en El Contrabajo.
-En "Tiempo" participaron unos quince músicos. ¿Cómo se traslada ese sonido a un local tan reducido como El Contrabajo? ¿Será a guitarra y voz?
-Es la manera de cerrar el ciclo de este disco, se trata de volver a la esencia de la canción y conocerla tal y como fue concebida con su melodía, armonía y texto. A todo esto hay que sumarle cambios en algunas canciones que han crecido y han sido sutilmente modificadas. Quería hacerlo en una sala pequeña y sentir cerca al público, intentar generar ese clima íntimo en el que muestras algo delicado. Será a guitarra y voz, aunque vendrán algunos músicos amigos a compartir canciones.
-Has tocado varias veces en directo con Eladio Santos. ¿Cómo es tu relación con él?
-En noviembre del año pasado fuimos seleccionados para la Semana del Autor que organiza Fundación Sgae. Coincidimos en el laboratorio de Madrid sin conocernos, y durante una semana compartimos taller de composición en los Estudios Sonobox. Aunque yo trabajaba con otro compañero, en los momentos que coincidimos hubo muy buena química. Una vez finalizado el taller seguimos en contacto y cuando tuve la oportunidad de profundizar en la obra de Eladio me di cuenta de que tenemos en Vigo a uno de los mejores escritores de canciones que conozco. A nivel profesional mi admiración es total y a nivel personal puedo decir que es un tipo encantador con el que siempre es un placer colaborar.
-¿Fue Eladio el que te puso en contacto con Manuel Colmenero, productor también de Vetusta Morla, o la razón por la que grabarás tu nuevo disco con él?
-Los Sonobox Estudios (donde realizamos el taller) están regentados por Manuel Colmenero y Javibu Carretero. Yo conocía varios de los discos en los que Manuel había trabajado y durante esa semana me sorprendió su punto de vista a la hora de analizar las composiciones y enfocarlas hacia una posible producción. Pasó un tiempo hasta que volví a coincidir con Manuel. Esto fue una noche en la que colaborando con Eladio y los Seres Queridos en el Fotomatón de Madrid justo después de versionar "Cena recalentada" de Golpes Bajos me propuso empezar a trabajar juntos.
-¿Entre tus influencias "de cabecera" hay grupos vigueses?
-Escucho mucha música y me cuesta encontrar directamente la influencia cuando tengo una canción terminada. La casa en la que crecí tenía los vinilos que mi tío, una vez desaparecido el Betonwerk [local vigués que ocupa desde 2005 La Fábrica de Chocolate Club], había dejado; esto supuso encontrarme con discos de bandas viguesas como Siniestro Total, Aerolíneas Federales o Golpes Bajos y además de decenas de LP's de bandas nacionales e internacionales. Toda esa intensa escucha a temprana edad ha marcado profundamente mi manera de componer y escribir. Por desgracia en las radios no se escuchaban las bandas que yo tenía en la estantería y Spotify, Deezer o ITunes no eran más que ciencia ficción.
-¿Y grupos de la escena viguesa que hayas descubierto en los últimos años?
-Presumido tienen un proyecto muy interesante, tengo muchas ganas de verlos en directo pero su presentación me pilló de viaje. Me encanta lo que está haciendo Basanta, creo que tiene muy buenas canciones, y lo último que he descubierto ha sido Antifrágil, tengo que estar pendiente de lo que hacen porque suenan muy bien.
-¿Habrá un cambio radical entre el sonido de "Tiempo" y el de tu nuevo trabajo?
-No creo que sea un cambio radical, hay una evolución lógica en las canciones que van saliendo. Va a ser un trabajo mucho más meditado, en el que la producción va a estar siempre de parte de la canción anteponiéndose al arreglo, formato de banda o estética. Este punto de partida me parece muy interesante y espero que en marzo pueda lanzar el primer adelanto.
-¿Cómo fue la experiencia de actuar en el festival Sonorama Ribera?
-Es un festival increíble con una capacidad de convocatoria brutal y muy buenas infraestructuras. Lo que más disfruto de estar en un cartel así, además de tocar para mucho público, es poder conocer nuevas bandas y coincidir con grandes amigos que también están de gira. Me sorprendió la cantidad de conocidos que había en el backstage.
-¿Fuiste una especie de niño prodigio?
-Para nada me considero un niño prodigio, siempre he tenido buenas aptitudes para la música y empecé a recibir clases de piano con 3 años, pero de ahí a niño prodigio hay un trecho. He estudiado mucho y lo sigo haciendo, y creo que ahí puede residir uno de los secretos de mantener la creatividad activa.
-Cuéntanos algo más de tu infancia, el colegio en el que estudiaste y cuáles eran tus lugares favoritos en Vigo.
-Tengo un gran recuerdo de mi infancia y la suerte de una familia increíble que me ha apoyado en todo. Estudié en los Jesuitas, de donde me he llevado un gran grupo de amigos que me siguen acompañando. Si tuviese que elegir un lugar de mi infancia diría la pista de patinaje de Samil, con su half verde y una increíble puesta de sol.
-Vas a tocar en Argentina y Uruguay. ¿Cómo tienes planteada esa gira?
-La primera fecha que tengo es en el Festival Internacional Serenadas en La Paloma (Uruguay), donde nos vamos a juntar grandes escritores de canciones iberoamericanos a los que admiro. Después de tocar en Montevideo me estableceré en Buenos Aires para conocer la escena de la ciudad y hacer un pequeño tour por varias ciudades. Tenemos tendencia a quejarnos de que todo está muy mal en España, pero no nos molestamos en buscar más allá de nuestras fronteras, teniendo un gran público hispanohablante. Este viaje espero que me sirva para entender lo que está pasando en estos dos países y enriquecerme con sus escenas culturales.
-¿Con qué te entretienes cuando no estás con la música?
-En los últimos años el surf ha ido ganando terreno en mi día a día. Es un deporte apasionante de contacto con la naturaleza y con una elevada carga de concentración. Soy una persona muy activa y este deporte me ayuda a desconectar y descansar la mente. Cuando estoy en Vigo procuro no pasar una semana sin moverme a alguna playa en busca de buenas olas.
-¿Por qué el nombre de Lesuit? Buscabas un nombre neutro, pero Lesuit transmite la idea de elegancia y refinamiento...
-Más que neutro, buscaba un nombre sin significado y sin referente, que no pudieses imaginar el estilo solo por el nombre. Hubo una gran criba y en el último momento apareció Lesuit que me gustó desde que lo escuché. Su sonoridad está acorde con lo que se escucha en las canciones, ahora si son elegantes y refinadas yo no soy quien para juzgarlas.
