Todo es grande en el undécimo Resurrection Fest, salvo la propia localidad lucense. Menos de 16.000 habitantes se enfrentan este fin de semana a la invasión de 76 bandas y 80.000 seguidores, el doble que la edición anterior. Buena parte de la culpa de tanta expectación la tiene Iron Maiden, el grupo más emblemático del heavy metal, y cuya presencia eclipsa a los otros grandes nombres del cartel, como The Offspring, Bad Religion, Bullet for my Valentine, Volbeat y Hatebreed. La banda británica aterrizó ayer en el aeropuerto de A Coruña para preparar un concierto espectacular.
Sobre las 21.00 horas de mañana sonarán los primeros acordes de "Doctor doctor", la canción de UFO que el grupo británico utiliza como introducción de sus shows desde hace años.
En las pantallas aparecerá un vídeo con el Ed Force One, la aeronave privada del grupo, un enorme Boeing 747 en el que cabe todo el material, su equipo y familias, y que pilota el propio cantante, Bruce Dickinson, piloto comercial. El reactor se encuentra atascado entre los árboles de la selva, hasta que una gran mano lo coge y lo impulsa, haciéndolo volar. Dickinson salta al escenario y entona "If eternity should fail", del último disco de los Maiden, "The book of souls", número 1 en 24 países, incluido España.
Este decimosexto álbum de estudio de Iron Maiden tiene un gran peso en un repertorio que permanece prácticamente sin cambios a lo largo de esta gira. "The number of the beast", "Blood brothers", "Children of the damned", "Powerslave" y "Hallowed be thy name" son algunos de los temas de un setlist que incluye únicamente quince canciones, aunque de largo desarrollo, por lo que el espectáculo se prolonga durante una hora y cincuenta minutos.
Además de Eddie, una pirámide maya y el avión del grupo, como se ha dicho, tienen protagonismo en la escenografía de esta gira, en la que no falta la pirotecnia.
Esta vez no han utilizado su Jumbo, estrenado en esta gira y bautizado como Ed Force One tras una encuesta en su web. Aterrizaron en Alvedro en un mucho más modesto BAe 146, de solo 29 metros de longitud. El Ed Force One, un Boeing 747-400, mide casi 71 metros de largo. Perteneció a Air France, está decorado con la imaginería y el logotipo del grupo y tiene 20 asientos en business y 54 en turista. El avión sufrió un accidente en tierra en marzo pasado y tuvieron que instalar dos motores nuevos. Costaron 4 millones de dólares cada uno.
Lo dicho, todo en el Resu es descomunal, y Iron Maiden es la banda que da la talla. XXL, concretamente.
Abonos agotados y transmisión en directo
- El pasado martes, la organización del Resurrection Fest comunicó que se habían agotado los abonos de tres días. Es la primera vez que esto ocurre, después de once años. Las entradas para mañana también están agotadas, aunque a la hora de escribir esta información quedaba papel para hoy viernes en la taquilla. La edición más internacional del festival batirá, según las previsiones, todos los récords, con 80.000 asistentes.El festival tiene una televisión online con retransmisiones en directo llamada The Rock Show, que ofrecerá imágenes de las actuaciones, entrevistas y otros contenidos en Resurrectionfest.es
Eddie, 36 años de un icono del heavy metal
- Ha estado presente desde la portada del álbum de debut de Iron Maiden y, como afirmó Gibson.com en 2008, es el icono más reconocible del heavy metal y también uno de los más versátiles. En efecto, Eddie the Head, que comenzó siendo solo una máscara zombi de atrezo, pasó a ser una mascota de cuerpo entero gracias al diseñador Derek Riggs, y desde 1980 ha sido, entre otras cosas, una momia egipcia, un cyborg, un enfermo mental lobotomizado y una criatura del mundo maya que arranca corazones, como se ve en la imagen de la izquierda, correspondiente al póster de la actual gira. Durante el concierto, la figura de Eddie se pasea por el escenario levantando su dedo corazón y juega con el guitarrista Janick Gers.
