Hace diez años, Luis Torras ya llamó la atención del médico psiquiatra padronés Jesús Fraiz, un hombre que lleva estudiando casos de longevidad desde hace más de treinta años, hasta el punto de haberse convertido en el máximo especialista en la materia en Galicia. Por aquel entonces, Fraiz ya vio en Torras un caso especial, no tanto por la edad, sino por su actividad: "Seguía pintando al mismo ritmo que cuando tenía 30 años". Una década después, las conclusiones del psiquiatra que ha puesto en marcha la Galería da Lonxevidade (donde aparecen registrados más 6.800 casos de longevidad humana en todo el mundo) se han confirmado: "No tuve la oportunidad de volver a visitarlo desde aquella vez. Pero he visto las fotos, le he escuchado hablar y creo que Luis comparte con otros muchos longevos una característica muy singular: que el reloj biológico del envejecimiento empieza a lentificarse a partir de los 95 años. Por eso su aspecto físico es prácticamente el mismo y sus facultades intelectivas, aunque puedan estar mermadas, los están en mucho menor medida que en cualquiera de nosotros".
¿Y cuál es el secreto de la longevidad? Fraiz sólo ha encontrado uno: "La genética, pero la genética individual, no la familiar. Por algo hay hermanos que duran mucho más que otros. Lo demás ayuda, pero es secundario". Cuando dice lo demás, Fraiz se refiere a aspectos relacionados con el carácter, con la psicología "con la manera, en fin, que tienen estas personas de afrontar las dificultades de la vida. Son gente que no solo encaja, sino que las acepta, cuando les vienen mal dadas. Les duelen, sí, como a todo el mundo, pero no se vienen abajo, no le dan más vueltas". "Son, además -añade el psiquiatra padronés- personas de vida rutinaria que se toman las cosas con calma, rara vez se alteran, más bien se resignan, aunque no se si ésta es la palabra adecuada". Los avances en la Medicina tienen, por supuesto, también mucho que ver en la proliferación de centenarios, según Fraiz "y desde todos los puntos de vista: hace treinta años quien se rompía una cadera, estaba condenado a usar silla de ruedas tel resto de su vida. Y te diré más: en un órgano tan sensible como el corazón, recuerdo el caso de un hombre al que se lo implantaron por primera vez a los 90 años y, a los 110, al agotársele las pilas, se lo volvieron a implantar: duró hasta los 114 años".
De menor importancia resultan, para Fraiz, factores como el clima la geografía, el tipo de vidaque se ha llevado...: "A veces, quien dura más, es el que ha tenido una vida más dura".
Japón, con medio millón de centenarios, es el país donde más longevos se registran. Galicia está situada en el tercer puesto de España con 1.500 personas censadas que han superado el siglo de vida.
¿Es Luis Torras Martínez el pintor en activo más longevo del mundo? "Responder a esa pregunta con total exactitud es imposible. Pero si me pides una opinión, yo te diría que sí".
