Lucas Vieites tenía ayer una sensación agridulce. Aunque confesaba su alegría porque su denuncia permitiese la desarticulación de la banda, el joven de Cambados recuerda que a los estafadores les vendieron material por valor de entre 60.000 y 70.000 euros. "Ahora el banco nos lo reclama a no-sotros y estamos en número rojos: nuestra tienda "on line" está cerrada y esto nos lleva a la quiebra", afirma.

La Guardia Civil no pudo recuperar el material informático que vendieron. "Los tres socios ya estamos trabajando en otros sitios; hay que seguir pagando hipotecas...", se lamenta.