La Justicia ha declarado el sobreseimiento libre del crimen de Chapela al fallecer el presunto autor de los hechos. El Juzgado de Instrucción número 2 de Redondela acordó, con fecha 3 de abril, el archivo de las actuaciones tras confirmar que fue el varón, Emilio Fernández Castro, expareja de María José Mateo García "Sesé", quien provocó la explosión de gas en la que ambos perdieron la vida. El auto concluye que no hay indicios de la participación de terceras personas y procede a sobreseer la causa.

El crimen ocurrió la noche del 20 de febrero de 2017. Una gran estruendo sobresaltó a los vecinos de este barrio de Redondela. Había sido una explosión de gas provocada. Los cuerpos de los fallecidos fueron hallados carbonizados en el interior de la vivienda. Varias dotaciones de bomberos tuvieron que apuntalar la fachada y vigas de la vivienda ante riesgo de desprendimiento y con el fin de facilitar el levantamiento de los cadáveres por parte de la comisión judicial, actuación que se retrasó más allá de la media noche.

Tras la deflagración, la expareja fue alcanzada por las llamas en el pasillo de la vivienda. Además de por el elevado calor que se generó, la muerte también les sobrevino por la intoxicación de monóxido de carbono, concretamente por el humo del fuego -y no por el gas butano, que no es tóxico salvo en casos excepcionales en los que se produzcan concentraciones muy elevadas-. El hecho de que hubiesen inhalado humo es indicador de que tras la explosión respiraron, por lo que los fallecimientos no se produjeron de forma justo instantánea tras la deflagración.

Las fuentes oficiales señalaban días después que Emilio, de 47 años, tenía "todo preparado" para acabar con la vida de María José, de 50. Apuntaban que la "intencionalidad" del suceso era "clara", subrayaban también los bomberos: en el salón de la vivienda había dos bombonas con las gomas cortadas por un cuchillo que se encontró en esa misma estancia y por el suelo se toparon restos de gasolina que habían sido transportados en una garrafa roja que estaba agujereada. Los cuerpos de ambos, que se vieron atrapados por las llamas, fueron encontrados en medio del pasillo.