Un ciudadano rumano aceptó ayer una pena de tres años de prisión como autor de una oleada de robos -al menos tres quedaron acreditados- en sendos domicilios de Vigo. Junto a él, en prisión provisional por esta causa, estaba acusado de estos delitos otro compatriota pero no acudió al encontrarse jugado de la Justicia. La vista se celebró ayer en el Juzgado de lo Penal 2 de Vigo y el juicio se resolvió con un acuerdo entre las partes.

Los hechos delictivos probados se desarrollaron durante los meses de octubre y noviembre del año pasado, aunque fuentes policiales no descartan su implicación en otros allanamientos. En el primero de los asaltos, y siempre según el escrito del fiscal, su modus operandi consistió en trepar hasta el balcón del primer piso de un edificio donde, tras romper los cristales y entrar en su interior, se apoderaron de 1.500 euros y otros materiales con los que huyó por la ventana de la cocina, que da a un patio común. Desde ahí pudieron acceder hasta la terraza de otro inmueble próximo por el que intentaron huir y donde perdieron parte de la mercancía robada en el primer domicilio.

Días después, el 7 de noviembre, los encausados emplearon un destornillador para acceder a otra vivienda donde "tomaron distintos alimentos de la nevera que se comieron", huyendo por la puerta de acceso a la casa y siendo interceptados en ese momento por la policía.

Los delitos en los que habrían incurrido son, por un lado un delito continuado de robo con fuerza en las cosas en casa habitada.