El Tribunal Supremo ha condenado a una mujer a tres años de prisión por apropiarse indebidamente un 1,4 millones de euros de la cuenta bancaria de su tía, ingresada en el hospital por su débil estado de salud, a la que hizo firmar unos documentos en blanco unos días antes de morir.

El alto tribunal ha estimado parcialmente el recurso de casación presentado por Paloma J.P. contra la sentencia de la Audiencia Provincial de Cantabria que la condenó en abril de 2016 a cuatro años de prisión y a una multa de 3000 euros, además de restituir en concepto de responsabilidad civil a todos los hereditarios universales las cantidades apropiadas por el delito continuado de apropiación indebida.

El Supremo rebaja la condena un año al entender que no existe una continuada delictiva porque el "apoderamiento se produce de una manera única", ya que aunque hiciese varias operaciones bancarias para retirar el dinero de la cuenta de la fallecida, se efectuó de un "idéntico modo". Además, indica esta resolución, que no se ha podido corroborar "a dónde fue a parar el dinero" porque la acusada se negó a responder a preguntas que no fuesen de su abogado.