Desde que el pasado febrero la Guardia Civil llevó a cabo el gran operativo contra la banda juvenil de Los Chukis, unos pandilleros a los que se atribuye la organización de peleas violentas, robos y otros altercados especialmente en la zona del Val Miñor, el nombre de este grupo que presuntamente trata de emular las maneras de las bandas sudamericanas ha salido a relucir ya en varias ocasiones con motivo de investigaciones o juicios. Este mismo mes tres supuestos miembros del grupo ingresaban en prisión por la paliza que, para robarle, sufrió un abogado en la zona de copas viguesa de Churruca. Y ayer dos chicos a los que también se relaciona con la banda -uno de ellos como presunto miembro- se sentaron en el banquillo del Juzgado Penal 3 de Vigo acusados de integrar un grupo de entre ocho y diez personas que agredieron con puñetazos, patadas, botellazos y hasta al menos un puño americano a dos jóvenes a los que abordaron la madrugada de San Juan de 2015 en el paseo de Panxón (Nigrán).

Por estos hechos dos menores ya fueron condenados en mayo. En relación a los dos mayores de edad que afrontan 4 años de cárcel y el pago de 13.200 euros en indemnizaciones, sólo uno, J.I.C., aceptó contestar a las preguntas de todas las partes. Lo hizo para rechazar que participase en la paliza, señalando que a la hora a la que fue, las seis y media de la mañana, ya no estaba en Panxón, ya que se fue en autobús para Vigo tras ser él golpeado en un altercado en la playa junto a las hogueras. "Aquella noche bebí y tengo lagunas", dijo, negando conocer a Los Chukis. El otro imputado I.H.C. -en la actualidad en prisión y que según la abogada de los agredidos consta como identificado en el atestado de la Guardia Civil sobre la banda de pandilleros- sólo respondió a su abogado. Y a la única pregunta que le formuló el letrado, si había participado en esa paliza de Panxón, también negó su autoría.

Frente a las versiones exculpatorias de ambos jóvenes, las dos víctimas y otro chico que iba con ellos los identificaron sin género de dudas. "Nos abordaron entre ocho y diez personas y nos golpearon durante tres minutos; hubo puñetazos, patadas...; a mi amigo le dieron botellazos en la cabeza y a mi me asestaron un golpe en la nariz con un puño americano, fue una paliza en toda regla y actuaban como grupo organizado", declaró uno de los heridos. El otro ahondó en que los acusaron de "insultar" a una chica y les abordaron a golpes sin mediar más palabras.

Varias personas dijeron a los lesionados que quienes les habían golpeado eran de Los Chukis y ellos investigaron en redes sociales como Instagram, donde hallaron fotos en los que identificaron a varios de sus agresores. La acusación particular aportó esas imágenes a la causa, pero la defensa, que pide la libre absolución, las impugnó.