Una turista de 76 años de edad falleció ayer tras desplomarse cuando entraba en el agua cerca del espigón de la playa de la Pineda de Vila-seca (Tarragona). La mujer estaba entrando en el mar hacia las 10.40 horas de la mañana y se desplomó. En un primer momento, la mujer permanecía consciente y tenía dificultades para respirar, aunque poco después entró en parada cardiorrespiratoria y los socorristas de la Cruz Roja allií presentes intentaron reanimar la sin éxito.