Dos años de cárcel y cinco de alejamiento con respecto a las víctimas. Es la condena que aceptó ayer un hombre que retuvo ilegalmente al empleado de una empresa de la calle Areal de Vigo intimidándole con un bate de madera con el que causó destrozos en la oficina, y por acosar al jefe de esa firma, a quien llegó a enviar flores mientras estaba en una convención en Valencia. La vista de conformidad se celebró en el Juzgado Penal 1 de la ciudad olívica. El acusado asumió la autoría de un delito de detención ilegal en concurso con robo con intimidación -se le retiró el de coacciones-. Se le aplicó como atenuante la de reparación del daño, ya que abonó parte de la indemnización.

Cuando el hombre retuvo al empleado durante dos horas buscaba al jefe de éste por una cuestión económica.