El mal tiempo sigue siendo el principal enemigo para encontrar a los dos pescadores que desaparecieron el pasado viernes cuando faenaban al sur de las Islas Cíes. El Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil no pudo realizar las labores de búsqueda en el entorno del islote de Agoeiro, donde se encuentran los restos de la planeadora Látigo, en la que viajaban, debido a las fuertes corrientes. Salvamento Marítimo, que informó ayer el dispositivo se amplió desde Oia hasta A Lanzada, explicó que tanto su equipo subacuático de Fene como los GEAS intentarán sumergirse a partir de mañana, cuando se espera que mejoren las condiciones. Junto a ellos esperan poder participar un grupo de buceadores de la ría, tanto de Vigo como de Cangas.
Durante la jornada muchos fueron los pesqueros que trabajaron por la zona. Entre ellos se encontraba Juan Alonso, el hermano del expatrón mayor de la cofradía de San Francisco de Vigo y padre de una de las víctimas, Julio Alonso. Hasta la zona se desplazó con unos compañeros buzos que se sumergieron en el agua en la zona donde apareció la planeadora. Al ver que no podían rebuscar en busca de Borja Alonso y de su compañero portugués Filipe Manuel de Brito, decidieron recuperar el trozo de embarcación que quedó por allí. "Eran buzos de confianza y recuperaron un trozo de la proa, porque no se pudo hacer más tal y como estaba el mar", apuntó Juan Alonso
El hermano del expatrón mayor de Vigo también indicó que un grupo de unos 10 percebeiros de Cangas peinaron la isla sur de las Cíes en busca de alguna pista sobre los dos pescadores. "Solo encontraron algunos restos más pequeños de la embarcación", añadió Alonso, que ayer a última hora estaba en Panxón para encontrar a alguien que conociera la zona. "Dicen que pudieron acabar en la zona de las Estelas, por el tema de las corrientes", concretó.
Los que tampoco pudieron hacer mucho fueron los buzos de la Guardia Civil. Junto a las embarcaciones de la Xunta y de Salvamento, los GEAS salieron desde el puerto de Vigo en torno a las 10 de la mañana. A bordo de la embarcación Corvo Mariño se dirigieron hasta Agoeiro. Tras hacer algunas inmersiones, finalmente tuvieron que dar la vuelta debido a las fuertes corrientes de la zona, como ya había indicado que pasaría el día anterior el patrón mayor de la cofradía de San Francisco de Vigo, Misael García.
Junto a unos compañeros de Canido, García partió ayer por la tarde con un barco hacia la zona para colaborar con las labores de rescate. Pero esta colaboración no va a quedar ahí. Como buzo profesional, junto a otros compañeros de profesión se han propuesto el crear un grupo para ayudar en las labores de rescate a final de semana. Lo integrarán buceadores tanto de Vigo (hay 17 con permiso para extraer erizo) como de Cangas (unos 30). "La gente quiere colaborar y nos pondremos a disposición de la Guardia Civil para ayudar sin estorbar su trabajo", indicó García.
Los helicópteros Pesca 1, Helimer 209 y Ángel sí que pudieron salir ayer para rastrear la zona. Por mar se movilizaron los barcos Salvamar Mirach, María Pita, Sebastián de Ocampo, Paio Gómez Chariño y Corvo Mariño.
