Salvo una suspensión de última hora, los días 16 y 17 de diciembre, tendrá que rendir cuentas ante la justicia un exempleado de banca acusado de defraudar más de 400.000 euros a cinco clientes de una entidad bancaria de O Carballiño. Ocurrió en 2008 y los estafados aún no han recuperado su dinero pese a la mediación de la Fiscalía. El banco ni siquiera se llama igual -era la antigua Caja Madrid-. El imputado, que trabajaba como comercial y atendía en caja, se enfrenta a siete años de prisión. Su mujer. presuntamente fue la cooperadora necesaria para hacerlo insolvente. El fiscal pide 2 años de prisión para ella.