Los Mossos d' Esquadra descartan que el recién nacido desaparecido el domingo en Barcelona fuese raptado en el Hospital Vall d'Hebron y sospechan que los padres están compinchados. Los agentes se apoyan en que la madre del bebé no denunció a su marido, al que había acusado de un supuesto secuestro. Los primeros interrogatorios realizados a testigos del centro sanitario y del entorno del menor confirman esta hipótesis. "Estamos buscando al padre y nuestra prioridad es encontrar al niño porque los médicos nos dicen que por las circunstancias en las que nació necesita atención médica", expresó un portavoz de la policía.