Mañana accidentada en las carreteras gallegas. Tras el fallecimiento de un motorista en Ribadavia, el siguiente suceso de importancia se produjo en el punto kilométrico 17 de la AG-57 que une Vigo y Baiona. La caída de un cable de media tensión propiciaba el cierre al tráfico de la autopista en ambos sentidos.

El desprendimiento del tendido eléctrico ha afectado a tres vehículos que transitaban por la Autopista del Val Miñor (AG-57). El tráfico a Vigo se ha desviado por la salida a Vincios.

La caída de la torreta ha afectado a 225 vecinos de la localidad de Vincios. Fenosa, que informa que las causas del suceso están siendo investigadas, apunta que 200 domicilios recuperaron el servicio 57 minutos después mientras que el resto lo recuperó en hora y media. Alrededor de las 13:00 horas el servicio estaba restablecido por completo.