La Fiscalía y la defensa de la mujer de Ribeira acusada del homicidio imprudente de su bebé alcanzaron una conformidad por la cual se impondrá a S.C.G. un año de prisión con la eximente incompleta de alteración psíquica y la agravante de parentesco. La mujer, que afrontaba inicialmente 13 años, no irá a la cárcel al mostrar el fiscal su conformidad con la suspensión de la ejecución de la pena. El jurado popular fue disuelto.

La acusada, soltera y de Ribeira, donde vive con su padre, impedido físico, y un hermano, minusválido psíquico, dio a luz a un varón la madrugada del 28 de diciembre de 2012. El parto fue en su habitación, sobre la alfombra. Sin tocar al bebé, cortó el cordón umbilical, sin atarlo, y se fue a duchar y dormir. Al levantarse por la mañana, esta mujer, con minusvalía del 67% y retraso mental ligero, sujetó al niño por un pie y lo tiró a la papelera de la habitación, cayendo éste de cabeza. Después, hizo un nudo a la bolsa de la papelera y lo dejó allí una hora más, hasta que lo tiró a un contenedor. El cadáver apareció en la planta de reciclaje de basuras de Cerceda. La causa de la muerte del bebé fue el abandono por parte de la mujer, que no fue al médico y rechazó las citas con servicios sociales del hospital.