Un vecino de A Cañiza,Christian V. V., se enfrenta a una petición de condena por parte de la Fiscalía de Pontevedra de 6 años de prisión como presunto autor de un delito de abuso sexual a una amiga suya a la que conocía desde pequeña, ya que ambos eran vecinos en esta localidad, cuando la víctima contaba tan solo con 12 años de edad. La acusación particular, que ejerce la familia de la niña, eleva esta petición de condena a 9 años (siete por el delito del que le acusa el fiscal y dos más por otro supuesto episodio de abusos que sucedió anteriormente).

Christian V.V., que en el momento en el que se produjeron los hechos (agosto y septiembre de 2010) tenía 19 años, se sentó ayer en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de Pontevedra y negó los hechos que se le imputan. Instantes después declaró a puerta cerrada la víctima quien ratificó ante el tribunal sus acusaciones.Según trascendió, la menor mantiene que el acusado, en septiembre de 2010, la llevó una tarde en su coche y la besó, le tocó los pechos, le introdujo un dedo en la vagina y la obligó a realizarle una felación. El acusado asegura que aquella tarde en su coche no ocurrió "nada de eso". Afirma que llevó a la menor a dar una vuelta en el vehículo "porque ella me lo pidió" y porque "me dijo que quería fumar un pitillo y que estaba muy cerca de su casa".

La acusación añade otro supuesto episodio de abusos que habría ocurrido un mes antes, el 16 de agosto de 2010, durante la Festa do Xamón de A Cañiza cuando el acusado supuestamente besó a la menor y le tocó los pechos. Un episodio por el que el fiscal no presenta cargos.

No obstante, el Ministerio Público sí considera probados los supuestos abusos ocurridos en septiembre y solicita al tribunal una sentencia condenatoria. Además de la declaración de la víctima esgrime como prueba, entre otros elementos, el informe de los peritos del Imelga que califican el testimonio de la menor como "altamente creíble".