La Policía Nacional ha desarticulado una banda, formada por tres jóvenes vigueses, aunque dos residían en Redondela, especializada en atracos a establecimientos de hostelería de Vigo y su área. Encapuchados, protegidos con guantes de látex para no dejar huellas y fuertemente armados –con pistolas, cuchillos y hasta un sable–, actuaban de madrugada y no dudaban en disparar al aire para intimidar a los empleados y hacerse con la recaudación de la jornada. Tanta precaución no impidió, sin embargo, que pudieran ser reconocidos con los dispositivos de vigilancia de uno de los locales en los que dieron el golpe. Se les imputan siete robos en menos de dos meses y fueron detenidos en una furgoneta en Mondariz cuando supuestamente se disponían a perpetrar otro asalto.

La investigación policial comenzó tras el primer atraco en la madrugada del 1 de noviembre en una cafetería–restaurante próxima de la estación de autobuses de Vigo. Cinco encapuchados accedieron al local sobre las tres de la madrugada con gran estruendo: dieron una fuerte patada a la puerta de cristal para anunciar su presencia y encerraron en el cuarto de baño, a punta de pistola, a dos empleados y a dos clientes. Después, realizaron un disparo al aire para que sus víctima supieran que iban en serio, y se llevaron los billetes de la caja registradora –despreciaron las monedas– y un sobre con boletos premiados de la Primitiva, si bien ya habían sido pagados.

Dos días después, dos hombres pistola en mano, que dispararon al aire en dos ocasiones para intimidar al personal, saquearon la caja registradora de la sala de juegos de la estación de autobuses, viguesa. Después le tocó a un establecimiento de Arcade. Varios encapuchados armados con una pistola y un sable se llevaron la recaudación.

El 16 de enero se llevaron dinero y varios cartones de tabaco en un bar del Camiño da Pedreira, en Redondela, y tres días después eligieron un bar de la calle Fragoso, en Vigo, para hacerse con la recaudación esgrimiendo uno de los asaltantes una pistola y el otro un cuchillo.

Uno de los integrantes de la banda perpetró en solitario el atraco a los empleados del conocido asador El Soriano de Vigo el 21 de enero. Pistola en mano les esperó en la puerta de salida y volvió con ellos al interior para llevarse la recaudación del día. El asalto duró apenas tres minutos, y finalizó con un "tranquilos que ya me voy con os cartos". En esta ocasión también exigió las monedas que había en la caja registradora. El botín ascendió a unos 3.000 euros.

Dos días después la banda actuaba en grupo en un local de venta de pizzas de la calle Ernestina Otero, en Redondela.

En los registros efectuados en los domicilios de los tres detenidos, de 26, 25 y 37 años de edad, la Policía Nacional intervino varias balas y prendas de ropa que podrían haber utilizado en la comisión de los atracos. Dos de los detenidos son viejos conocidos de las fuerzas de seguridad. A uno le consta una orden judicial de detención e ingreso en prisión, así como seis antecedentes anteriores por robos con fuerza tanto en vehículos cono en viviendas; a otro diez antecedentes y al último, una detención Los tres pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo, que abrió las diligencias al encontrarse de guardia el día que se cometió el primer de los atracos.