"La enfermedad de Azhéimer es un reto de todos". Así lo aseguró ayer la neuróloga del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (CHUVI), profesora de la USC y miembro de la Red Gallega de Investigación en Demencias, María José Moreno, en el Club FARO, que recordó que esta patología es la causa más frecuente de demencia -entre un 60 y un 80%- y una de las principales causas de discapacidad y dependencia de las personas mayores. En este sentido, recordó la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce esta enfermedad como una prioridad de sanidad pública y dio algunas cifras que maneja esta entidad: cada tres segundos se diagnostica un caso de alzhéimer, lo que significa diez millones de nuevos casos cada año en el mundo.

"Este es un problema de enorme magnitud que trasciende el ámbito sociosanitario y que implica a toda la sociedad y que requiere un abordaje desde una perspectiva integral que alcance con los mismos niveles de intensidad tanto al paciente como a su cuidador", afirmó en su ponencia, titulada "La enfermedad de Alzhéimer, la epidemia del siglo XXI". Y los datos la avalan: según la OMS, en 2015 había 50 millones de personas en el mundo con alzhéimer y se prevé que esta cifra se triplique y alcance los 152 millones en 2050.

¿La causa? La cada vez mayor esperanza de vida de la población, ya que la edad es el principal factor de riesgo de esta enfermedad degenerativa que fue descrita por primera vez en 1906 por el médico alemán Alois Alzhéimer. Tanto es así que un 3% de las personas entre 65 y 74 años padecen esta enfermedad, porcentaje que se elevan hasta el 17% en la franja entre los 75 y los 85 y se sitúa en el 32% en mayores de 85.

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La neuróloga aseguró que ante estas previsiones, urge adoptar medidas globales si el mundo no quiere acabar enfrentándose a lo que los especialistas denominan ya el "sunami perfecto", ya que al cada vez mayor envejecimiento poblacional hay que sumarle una cada vez más baja natalidad, lo que hace que disminuyan los cuidadores.

Pero la edad no es el único factor de riesgo del alzhéimer. Según la doctora Moreno, hay otros factores modificables, como el tabaco, la diabetes mellitus, la obesidad, el sedentarismo, la hipertensión, la hipercolestemia, el nivel educativo, la falta de estimulación cognitiva y las grasas saturadas que aumentan el riesgo de desarrollar una enfermedad de Alzhéimer que, en el 99% de los casos es esporádica. "A mucha gente con familiares con esta enfermedad les preocupa que sea hereditaria, pero la realidad es que menos de un 1% de los casos lo son", expuso.

La especialista explicó que en estos momentos no hay ningún tratamiento que prevenga, cure o ralentice la enfermedad el daño neuronal provocado por la enfermedad y que lo único que hace es mejorar la sintomatología en la fase inicial. Sin embargo, añadió que la gran esperanza está en que se siga avanzando en las investigaciones y expresó su convencimiento de que los nuevos criterios aprobados recientemente "den sus frutos".

La neuróloga del CHUVI abogó por una mayor información y sensibilización sobre la enfermedad y garantizar un trato digno al paciente. "El alzhéimer no es solo una cuestión del familiar de turno a quien le toca cuidar al enfermo, ni siquiera solo de su familia; es una responsabilidad de toda la sociedad", dijo la especialista, que añadió que los cuidados tienen que estar centrados en la persona, desde los grandes laboratorios y el sistema sanitario hasta la familia. "Nuestros cuidados tienen que estar centrados en la persona y garantizar sus derechos y su dignidad. Y nunca excluirlo. Recordar que detrás de la enfermedad está la misma persona de siempre", afirmó.

Y en este sentido, también se refirió a los especialistas médicos. "Dentro del ámbito sanitario hay mucho nihilismo respecto a la enfermedad de Alzhéimer, que yo me imagino que muchos de ustedes lo habrán sufrido. Tiene alzhéimer, pues ya nada. Vivimos en una sociedad que excluye todo lo diferente, todo lo que molesta. Hay que ser guapísimo, listísimo, jovencísimo, riquísimo".

La doctora Moreno, que intervino ante un Auditorio Municipal do Areal lleno, también explicó, de forma muy didáctica, qué es una demencia y qué es concretamente la enfermedad de Alzhéimer, cuáles son sus fases y qué es lo que falla en el cerebro para que la persona vaya perdiendo progresivamente la memoria y la capacidad de aprender cosas nuevas hasta hacerse absolutamente dependiente.