Hay situaciones de emergencia que no pueden esperar y en las que lo que se haga o se deje de hacer puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Para evitar que esto suceda, la Fundación Escola Rosalía, con la colaboración de la Asociación Galega de Medicina Familiar e Comunitaria (AGAMPFEC), pone en marcha el programa formativo "Gestos salvadores", dirigido a instruir en la técnica de reanimación cardiopulmonar (RCP) a niños de educación primaria, ESO y Bachillerato. Instructores especializados en esta técnica y avalados por el Consejo Europeo de RCP impartirán esta formación, que el curso pasado ya recibieron cerca de 250 alumnos del colegio vigués Rosalía de Castro, así como una veintena de profesores de este mismo centro.

Según Lara Menéndez, de la Fundación Escola Rosalía, el programa pretende llegar además a cuantos más espacios públicos posibles mejor. "Creemos que es muy importane que los centros deportivos, clubes y espacios municipales de ocio cuenten con personal cualificado en RCP", explica.

En el caso del programa concreto para escolares, se trata de una formación adaptada a la edad del niño que se centra en inculcar una serie de conceptos básicos dirigidos a salvar vidas. "Lo más importante y esencial en un caso de emergencia es que el niño sepa llamar al 112, algo que es capaz de hacer un niño pequeño. Yo tengo un hijo de tres años que sabe que si yo estoy en el suelo de casa y no respiro tiene que llamar al 112, decir dónde se encuentra y abrir la puerta", asegura Julio Villa, técnico de emergenciass, instructor y represtante de AFAMFEC en Vigo.

En el caso de que el niño ya lea, el especialista aconseja apuntar el teléfono de emegercias y la dirección en un papel y colocarlo en un sitio visible en la nevera. "El niño solo tiene que saber que si pasa algo, tiene que ir a la nevera y hacer lo que está escrito ahí. Hay niños que se han tirado horas en casa con su abuela o abuelo muerto porque no estaban sus padres y no sabían qué hacer", alerta el representante en Vigo de la AGAMPEC, que recuerda que ocho de cada diez paradas cardiorrespiratorias se producen en el domicilio del paciente.

Villa recuerda que en determinadas situaciones de emergencia, el tiempo juega en contra. Presisamente ganar tiempo al tiempo es lo que pretende "Gestos salvadores". "No se trata de entablillar un brazo, porque eso puede esperar a que lleguen los servicios de emergencias. Sin embargo, una persona que sufre un atragantamiento o una parada cardiorrespitaroria no puede esperar los 8 o 10 minutos que tarda en llegar la ambulancia. Hay que intentar que respire antes porque cuanto más tiempo esté sin respirar, menor será su probabilidad de sobrevivir", insiste.

Tres son los "gestos salvadores" básicos, según Villa: la maniobra para solventar un atragantamiento, el masaje cardiaco y la posición lateral de seguridad. "Los niños responden muy bien a este curso", asegura Villa, que añade que cada escolar recibirá la instrucción en función de su edad.