La provincia rusa de Novosibirsk se dispone a prohibir a los perros ladrar en horas de descanso bajo amenaza de una multa para sus dueños, de acuerdo a una iniciativa legal aprobada hoy en primera lectura en el Parlamento regional. La norma prevé que los canes tengan prohibido hacer ruido desde las 22.00 horas y hasta las 7.00 de la mañana los días laborables.

Los fines de semana se les exigirá reprimir sus instintos y guardar silencio hasta las 9.00 de la mañana. Además, los perros tampoco podrán ladrar a la hora de comer, de 13.00 a 14.00 todos los días, y cualquier violación de la norma conllevará una multa de 3.000 rublos (50 dólares). Entre los afectados por la ley se encuentran también los gatos, cuyo maullido en horas de descanso puede acarrear el mismo castigo para su propietario.