La Universidad de Vigo reúne desde ayer y hasta hoy a 80 hackers gallegos en la quinta edición del evento HackForGood de Telefónica. Desarrolladores de aplicaciones de toda Galicia, muchos de ellos procedentes de las ingenierías de Telecomunicaciones, Industriales e Informática de la propia Universidad, se congregan para construir aplicaciones que, a través del uso masivo de datos, produzcan un gran impacto social.
El rector de la Universidad, Salustiano Mato, así como la directora de Telefónica en Galicia, Marta Méndez, dieron ayer la bienvenida a los participantes y les animaron a trabajar en sus proyectos.
Divididos en equipos, los participantes trabajan en función de un reto, el desarrollo de una aplicación. Los grupos han propuestos todo tipo de iniciativas: una herramienta para detectar el ciberbullying, un traductor bidireccional de lengua de signos, una aplicación para contar de manera rigurosa el número de asistentes a una manifestación, un videojuego para vivir en primera persona qué es tener una discapacidad, una aplicación para controlar la caducidad real de los alimentos y otra para conectar las viviendas a la red.
"Durante el día y medio que dura elaboran ese proyecto y después tienen que llegar a unas conclusiones, que suben a la red a través de un vídeo", completa José Cidrás, director de la cátedra de Telefónica en la Universidad de Vigo.
El encuentro se realiza de manera simultánea en otras 21 universidades españolas. En cada sede se elegirá un proyecto ganador que competirá a nivel nacional. Además, optan a numerosos premios. En el caso de Vigo se estructuran en cuatro categorías: a la Innovación, dotado con 500 euros y concedido por el Consello Social de la Universidad; a la Innovación Energética, también de 500 euros y concedido por la cátedra de Telefónica; al Desarrollo Sostenible, concedido por la oficina de Medio Ambiente de la Universidad y el premio HackForGood de Formación, que otorga una beca para cursar un máster de Ingeniería de Software.
Cidrás destaca que se trata de "una forma de trabajar en conjunto y estar motivados en un reto que toman como propio más que el de un profesor que les dice lo que tienen hacer". Subraya que les "ayuda a desarrollar su creatividad" pero desde un punto viable: "Tienen que venderlo y hacerlo, no puede ser una idea utópica".
Cidrás destaca que con este evento los estudiantes trabajan de manera muy similar a la de la vida profesional que les espera. "Esta fase a veces falta en la formación académica porque somos muy buenos planteando un problema y analizándolo desde un punto de vista matemático, pero no, a lo mejor, difundiéndolo ni añadiéndole creatividad o impacto social, que es lo verdaderamente importante".
El encuentro es una oportunidad también laboral pues si el organizador, Telefónica, considera interesante alguna de las propuestas puede tomar el proyecto y llevarlo adelante. El director de la cátedra explica que, "siempre contando con los creadores porque el proyecto siempre será suyo y son ellos quienes lo desarrollan", la compañía lo canaliza a través de sus herramientas de colaboración.
Motivación
Paralelamente al trabajo, los grupos reciben talleres y conferencias que apoyan sus proyectos. Ayer el jefe de datos de Telefónica, Chema Alonso, uno de los hackers más reconocido de España, se conectó a través de videoconferencia con las 22 universidades que concursan para hablar sobre el impacto de las tecnologías de la información en la sociedad.
Alonso invitó a los hackers a deshacerse de "excusas mentales" y a ejecutar sus ideas. "Cualquier excusa que te está impidiendo hacer algo te la tienes que sacar de la cabeza y si hay alguien que te dice que eso no es posible pues quítatelo a él de en medio", dijo al auditorio.
Recordó a los estudiantes que la Universidad es una gran oportunidad, pero incidió en que su objetivo no debe ser "aprender a usar herramientas, sino transformar la tecnología".
Anadi y FonteaIngeniería de minas y teleco.Una pelea contra el ´ciberbullying´ a través de la monitorización de redes
Ahmed Anadi y Diego Enrique Fontea tienen 20 años y quieren colaborar en la lucha contra el bullying y otras formas de acoso. Por este motivo han centrado su proyecto en evitar el acoso a través de internet.
Anadi, alumno de Ingeniería de Minas y Fontea, de Telecomunicaciones, están desarrollando una herramienta que monitoriza en tiempo real las principales redes sociales para que en caso de que un niño sea acosado sus padres, algún responsable o incluso la Policía puedan detectarlo en el mismo momento que se produce la agresión y actuar. La aplicación en cierta manera espía las interactuaciones del usuario al que se quiere proteger y envía una notificación cuando detectar, por ejemplo, insultos.
"Lo estamos centrando en el acoso escolar a través de la red pero puede emplearse también para otros tipos de acoso", comenta Fontea, que añade que de esta manera pretenden "erradicar de raíz" las agresiones a través de Internet. "Queríamos aportar nuestro granito de arenas a las campañas contra el acoso escolar", aseveran ambos.
Miguel Riobó y equipoTelecomunicacionesUn enchufe para convertir las viviendas ya existentes en hogares inteligentes
El internet de las cosas está de moda. Las viviendas domotizadas, aquellas que cuentan con la tecnología necesaria para controlarse de manera remota, se promocionan cada vez más y el grupo de Telecomunicaciones que Miguel Riobó representa vio en esto "un buen nicho de mercado". Su idea es crear una herramienta, concretamente un enchufe y si correspondiente plataforma, que ayuda a las viviendas que ya existen a automatizarse.
"Por ejemplo, un profesor nos acaba de comentar que a un vecino le quedó una bomba de agua encendida tres meses, con el coste de agua que eso supone, si hubiese tenido una aplicación que de manera remota le permitiese apagar esa bomba se hubiese ahorrado un dinero considerable", cuenta Riobó. "La soluciones que ofrecemos es conectar las casas ya existentes a internet", resume. No solo permite un control a distancia y su correspondiente ahorro energético, sino que además puede mejorar la autonomía de las personas mayores. "Si se queda dormida con una estufa encendida, podemos verlo desde la ´app´, apagarla y evitar ese peligro".
Nanín, Eiro y LoisTecnologías industrialesLos deshechos como fuente de energía y recursos económicos y demográficos
El objetivo de Josué Nanín, Álvaro Eiro y Daniel Lois es reutilizar los recursos que sobran de la limpieza de montes y deshechos particulares que sean orgánicos para generar electricidad a través de una planta de biomasa.
Eiro explica que lo han diseñado pensando en "poblaciones relativamente pequeñas, para que tengan un ingreso extra de lo que ahora mismo es un gasto". Trabajan en el desarrollo del proyecto al completo, desde el sistema de recogida, al de tratado de los materiales así como el proceso para generar la electricidad. También el modelo de negocio para explicar a los Ayuntamientos cómo pueden sacar beneficio a esta inversión.
La limpieza de montes es obligatoria para evitar incendios con lo que el grupo considera que "puede ser muy interesante a nivel gallego" ya que podría motivar esta labor y acabar con la problemática forestal. Eiro añade que también puede ser un revulsivo para el rural ya que "si la gente tiene un incentivo a mayores para cuidar el monte y estar allí esperamos que sirva para que se despoble menos".
Nuno Troitiño y equipo
Ingeniería informáticaLa vida de las abejas a salvo y mejor miel gracias al control de las plagas
Appybee es un aplicación que intenta paliar con sistemas propios dos enfermedades endémicas de las abejas como son la varroa y el loque. Nuno Troitiño, uno de los creadores, ya ha probado su creación en sus propias colmenas y asegura que ha conseguido mejorar su vigorosidad.
Lo consiguen a través de un sensor de gases que alerta de la presencia de alguna de estas enfermedades. "Si se detecta eso a tiempo, mejoramos la vida de las abejas y aparte la claridad y cantidad de la miel y evitamos la tinción de gran -sistema con el que se detectan las bacterias- con lo cual evitamos costes de laboratorio", asegura Troitiño. Además, añade que el sistema puede exportarse también al vino, aceite y otro tipo de cultivos.
Ya han conseguido dos apicultores que probarán su aplicación en Ourense, campus desde el que participan en el evento, y buscan otros interesados para seguir desarrollándola. Troitiño indica que la plataforma, que ya se puede visitar, "es muy sencilla y se muestran los datos muy claros para que el apicultor pueda verlos a tiempo real y actuar".
