La "lenda do esquecimento" de Xinzo de Limia inspiró a Israel Alonso Quintas (Vigo, 1985) para componer "Galaicus", una pieza con la que quedó finalista en la tercera sección en la último Concurso Galego de Composición para Bandas de Músicas que organiza la Federación Galega de Bandas de Música en colaboración con la Axencia Galega das Industrias Culturais (AGADIC). Esta obra narra la llegada del general y cónsul romano Julio Décimo Bruto, apodado "Galaicus", a tierras ourensanas y la leyenda en torno al río Limia. Según la leyenda, los hombres de Galaicus identificaron este río con el legendario ethes, "el río del olvido", cuyas aguas borraban los recuerdos de quien bebiera o cruzara sus aguas. Según la leyenda, Galaicus cogió el estandarte de la legión, lo cruzó y ya en la otra orilla llamó por su nombre a cada uno de sus soldados. "Esta obra lo que trata es de describir toda esta leyenda", dice.

Aunque el compositor vigués asegura que, de momento, no le falta trabajo, reconoce que este tipo de certámenes son un magnífico escaparate para difundir el trabajo musical y sobre todo, para que las piezas de los compositores contemporáneos se ejecuten.

"Que interpreten tu obra es muy complicado. Yo toco en la Banda de Música de Pontevedra y tengo la suerte de que cuando tengo que estrenar alguna obra, ellos me la estrenan. Si no, te queda la opción de internet, que también ayuda bastante", reconoce. Con esta banda ha estrenado "Marcha fúnebre 24JL" obra dedicada a las víctimas del accidente de Angrois, a finales de 2013 "Obertura 2012", pieza que compuso con motivo del 110 aniversario de la banda y que después se estrenó también en la Casa de la Música de Oporto (Portugal), y este mismo año, "A pedra moura", poema sinfónico inspirado en las leyendas que giran en torno al petroglifo de Fragoselo (Coruxo).

Formado en el Conservatorio Superior de Música de Vigo y actualmente profesor de saxofón, Alonso se inició en la composición de forma autodidacta. Su primera pieza fue "King's Legend", una sonatina para saxo soprano. Su segunda pieza fue ya un poema sinfónico para banda de música popular, "Sangral", que fue seleccionada como obra obligada en la sección tercera del XIII Certamen de Bandas de Música de la Diputación de Pontevedra. Esta obra fue la que hizo que su nombre comenzara a sonar dentro del mundo de las bandas de música y le animó también a continuar componiendo. "Desde hace tiempo me están haciendo bastantes encargos", reconoce. Uno de estos encargos es el arreglo para banda popular y voz del himno de Xinzo de Limia.

Actualmente, estudia dirección en la Academia Europea de Dirección. "Comencé a estudiar dirección como algo complementario y me gustó muchísimo. Cuando tú eres director tienes que escuchar mucha música y esto a un compositor lo complementa", explica.